Desean una ayuda pública para conseguir el gasoil a 0,30 euros en vez de los 0,53 actuales.
Manifestaciones por las calles provocan atascos en el Havre, el puerto mas activo de Francia mientras los barcos bloquean la entrada.
El ministro de pesca galo cede a las presiones y recibirá al sector proximamente.
Los pescadores franceses que durante toda la semana han anunciado movilizaciones como protesta por la subida de los precios de los carburantes, ayer ya pasaron de estar amarrados y dejar sin pescado a la población a acciones más contundentes. Durante hora y media, parte de los tripulantes de los pesqueros de bajura bloquearon la entrada al puerto de El Havre, el de mayor actividad de Francia. Otra parte de los pescadores se manifestaron por las arterias que llevan al centro de la ciudad, lo que provocó atascos en el tráfico, según explicó la policía.
Tras estas acciones, el ministro de Pesca galo, Michel Barnier, ha anunciado que, dada la situación, cede ante los huelguistas y accede a recibir a los representantes de los pescadores a partir de la próxima semana. Aun así, en el sector no descartan seguir con las movilizaciones hasta que sean recibidos.
El gasoil, a 0,53 euros
Entre otras medidas, los pescadores piden algún tipo de compensación de forma que no se vean tan afectados por la escalada de los precios del combustible. Actualmente, para los marineros franceses el litro de gasoil se paga entre los 0,51 y los 0,53 euros, muy por encima de los 0,30 euros que, según aseguran, es el precio al que su actividad puede considerarse rentable.
Ante esta situación, prácticamente todos los pescadores de los puertos de la costa atlántica francesa se encuentran inactivos, especialmente aquellos que se dedican a las artes propias de la pesca de bajura.
El Ministerio de Pesca francés ya había adelantado la pasada semana una serie de medidas de ayuda al sector, entre las que se encuentran un plan con un montante de 25,5 millones de euros y la reducción de intereses en los créditos de los que sean beneficiarios los jóvenes patrones de pesca.
Aun así, la falta de una actuación concreta contra la subida del carburantes desencadenó las movilizaciones actuales.
Esta misma semana los armadores gallegos también advirtieron que los altos precios del fuel está dificultando su actividad. Aseguran que con los casi 0,50 euros que pagan por litro a los arrastreros de litoral les resulta cada vez menos rentable faenar, sobre todo con el nivel actual de precios del pescado.