Pues a pesar de la mala predicción marítima, con alerta naranja por fuertes vientos, y olas de mas de dos metros, mi compañero Jonay, y yo, acompañados por Dani, nos decidimos a buscar este sábado un sitio azocado, donde las inclemencias meteorológicas nos permitieran pasar u buen rato buceando... Al final tras mucho pensar, nos decidimos por el suroeste de la isla, que ante los tiempos del noreste siempre nos ofrece una zona de calma.
al llegar el mar parecía bueno, un poco de oleaje, pero nada que no se pudiera controlar con un buen vistazo antes de saltar al agua, por el contrario el agua estaba bastante turbia, unos 15m de visibiliidad, fría y con bastante alga en suspención, por debajo de los 20 m te movía como si estuvieses en la orilla.. vamos que no eran las condiciones mas favorables para que el pescado de roca se aguantara.... empezamos a salir hacia fuera y en la primera marca conocida caen las primeras piezas, una enorme maria francisca (una especie de corva canaria) y un gran pejeperro de mi compañero, seguimos y aunque el movimiento de sargos y viejas era bastante bueno, no era lo que buscabamos ahí fuera, de pronto aigo un grito de mi compañero y voy a verlo, llego y me dice "le acabo de disparar a un mero manso, no se que ha pasado, pero la varilla se le ha deslizado y se ha quedado tal cual debajo de la piedra", ante esto, ventilo rápido y para abajo, al ir llegando se ve claramente la piedra redonda en medio de la llanura lisa que forma el fondo, miro por un lado nada.. .miro por otro nada... uff.. miro por el tercero y ahi está el mero... tan tranquilo... como si no le hubieran disparado jeje, total, que tiro en la cabeza y merillo para arriba...¡¡¡ la pesca ya estaba hecha, buscamos algo mas, pero sin fortuna, no son épocas para pedirle mucho al mar, a la pesca se sumo un congrio, especie muy muy rara en las islas occidentales, de hecho es el primero que cojo en mi isla, y para fuera, la pesca ya estaba mas que rehecha¡¡¡¡
Saludos¡¡¡¡
