Un viejo estaba sentado en un banco en un centro comercial cuando un joven se le acercó y se sentó también en el banco.
El chico tenía el pelo revuelto y de diferentes colores (verde, rojo,
naranja, azul y amarillo) y el viejo se lo quedó mirando fíjamente, por lo
que el joven le dijo.
- íƒÆ’í¢â‚¬Å¡íƒâ€š¿Qué pasa, abuelo, nunca hiciste nada salvaje en tu vida?.
Y el viejo va y le responde:
- Bueno, una vez me emborraché y practiqué el sexo con un loro, por lo que estaba pensando si tu serías mi hijo.