Ayer saqué a los niños a pescar a un bajito cerca de mis zonas. Es un bajo de piedras con profundidades que van de los 7 a los 12 metros. Generalmente está sucia el agua, pero ayer estaba bastante buena.
Fue una jornada de pieceo tamaño "fritura", pero Ale se lució con su primer carite (Sierra).
Me cuenta que estaba mirándome desde arriba cuando de pronto el carite pasó por encima de mi, entonces me gritó para que yo subiera y lo arponeara, pero entre mi privilegiado sentido de la audición y que con la capucha me convierto en casi un autista, no lo escuché. Entonces recordó mis enseñanzas y se lanzó a perseguirlo hasta acortar distancia para poder alcanzarlo con la varilla de su Rob Allen de 70 cm. Luego su hermano se lo remató con su Bucanero de 86.
Las fotos del orgulloso pescador