Pues es lo que tiene estar de veraneo con la familia, de repente por la mañana te suelta la mujer "Te puedes ir esta tarde a pescar que la nena y yo tenemos plan"
Como para decir que no.
Pillo trastos y salgo disparado, visito un par de calas en las que es imposible tirarse y a la tercera y después de estar 20 minutos en el coche realizando una espera consigo mi primera captura.......aparcar
esto empieza bien.
Me tiro y voy directo al hot point veraniego, que traducido a idioma pescasub es culo pegado a pared de acantilado para evitar sustos. Bingo! llego y me gusta lo que veo, mucha carnada, el agua movida de los días anteriores y movimiento sexy y nervioso del pescaillo
Empieza la fiesta, es el típico día que todo fluye y disfrutas de cada espera y de cada acecho, cómo se agradecen estos días
a las pocas bajadas veo a unos cuantos espetones que están pululando por la zona, me hacen una primera entrada preciosa, que dejo pasar porque estaba comprobando que no andaran por la zona sus amigos los dentones y no quería asustarlos.
Fotograma de una pasadita de los espetones.
Una vez realizadas las comprobaciones decido cargarme a dos de ellos en dos esperitas por la zona
Más adelante, en otra espera a escasos metros de mí, veo salir de su agujero un buen sargo a ver quién estaba molestando su siesta....error, se vino para casa también.
Aquí tengo un momento de turbación, veo en una piedra grande del acantilado un kayak y al lado una mole blanca y gorda como Dios lo trajo al mundo
con los colgantes al sol
hay que moverse, salgo pitando de ahí
Sigo avanzando e intentando borrar esa última imagen de mi mente, se está acabando la zona hot point, así que me quedan pocas bazas y el regreso, preparo una bajada, doy el golpe de riñón y cuando apenas he avanzado un par de metros veo que me vienen a visitar 4 o 5 serviolitas, eso pasa por ir a pescar duchadito y perfumado
opto por ponerme en modo hoja que cae sin mover ni un sólo músculo y al momento pasan dos de ellas a tiro, apunto y una queda brochetizada, así que a la boya y a seguir.
Aquí la anécdota: En una espera veo a lo lejos una dorada kilera totalmente a su bola, decido acercarme un poco porque no viene, está comiendo, empiezo a moverme y ella empieza a venir, me quedo quieto y apunto, lentamente se acerca.....y sigue.....y sigue, despacito pero segura...y sigue...coño!! se dará con el fusil y yo que quería esperar al giro, son de esas veces que no te apetece hacer un tiro frontal vete tú a saber por qué, y a escasos centímetros de la varilla gira, aplicando un cambio de ritmo a lo Mesi que hace que cuando aprete el gatillo ya no esté
ese fallo no lo olvido, fue buenísimo, os dejo el fotograma para que podáis ver el momento en el que esa dorada volvió a nacer.
Aún pude ver un par de dentones que no quisieron entrar, así que contento y feliz a volver, a esconder de miradas curiosas entre la boya y las aletas la pesca y con tiempo de sobra para rematar el día con la familia, misión cumplida y mono tranquilo.
Aquí la foto de la pesca:
Ya cuando vuelva a la civilización monto el video y os lo pongo.