Desde hace seis años vivo en Madrid y sobre todo desde que soy padre cuento con lo dedos de las manos los días que puedo ir al agua a lo largo del año
Eso hace que por muy en forma que esté (que tampoco es el caso
) no haga las pesqueras de antes. Lo que si hago es disfrutar como un niño chico, no es que me de igual no pescar, pero el simple hecho de estar debajo del agua y ver mojarritas me hace inmensamente feliz
Tengo muy pocas posibilidades al año de "liarla", pero bueno, no os voy a aburrir más con mi historia de pescador de interior, ni con mis salidas a cero...
Muy de vez en cuando se alinean los astros y suena la flauta
Así es como se dió mi última jornada de pesca, salí solo a una zona tranquila a poca profundidad en busca de un pieceo, 7-8 metros de profundidad.
Nada más entrar se me afilan los colmillos oliendo como en una zona muy tranquila hay bastante comezón y muy nervioso dando bandazos... algún depredador tiene que estar cerca!!
Me pongo a hacer esperas y hay bastante caballa nerviosa haciendo quiebros. Algo se tiene que estar meneando por aquí. Y en una espera mágica, de repente detrás de las caballas aparece un banco de túnidos preciosos entrando a placer. Pura fuerza y bonita lucha que ofrece para finalmente conseguir tenerlo entre mis brazos y admirar esta musculosa e hidrodinámica bala de plata
Me paso tres horas espereando y consigo sacar estas cinco albacoras, no me lo puedo creer, que pesca más divertida, cómo he disfrutado!!
Me vuelvo a Madrid cargado de pescaito y con una sonrisa enorme!!
Abrazos
(Las fotos están alojadas en el servidor para que no se pierdan, hay que abrir sesión en el foro para verlas)