Había que esperar a la primera tormenta post-verano para empezar a ver ese movimiento sexy de vida que hace disfrutar de cada bajada.
Llego al mar y hay viento fuertecillo de norte, con oleaje pero de superficie, sin casi corriente y el agua, o el caldo, a 26º, lo que hace disfrutar con un 3'5mm y muy poco plomo, así da gusto
Lo dicho, llego a la primera zona y hay mucho comezón, llega hasta superficie y hay columnas que bajan hasta el fondo, muy variado, veo algunos dentoncetes jugando y llenándose la barriga, y en una de esas bajadas entra un banco de ellos y entre ellos hay un par que ya son de buen tamaño, estoy bien posicionado y entran por donde toca, inmediatamente uno de los buenos se encara decidido y entra sin miramientos hasta la cocina, cómo mola cuando te lo ponen así de fácil
tiro cómodo y aunque arranca e intenta frotarse contra las rocas no tiene nada que hacer, acaba en mis manos.
La cosa promete, porque la captura ha sido en las primeras bajadas y aunque volveré a ver algún diablillo más, será pequeño y resultará que era la única opción que tendría durante la jornada de hacerme con otro.
Sigo avanzando y llego a la "zona corvas", qué espectáculo!!
nubes de ellas, qué belleza, (pongo foto de una de ellas) me hago con una bonita, la más gorda de uno de los grupos y disfruto haciendo acechos y viéndolas, no tiro a ninguna más porque el espectáculo ya me parece suficiente trofeo.
En uno de los acechos veo un par de picudos, que también había visto varios gorditos para nuestra zona pero éste ya daba una talla respetable, de las que te hace pensar que es un turista del norte
se lleva un tiro, está claro que los picudos están ahora de freza porque estaba ovada.
Y finalmente en una espera en la que me entran un par de diablillos pequeños muy nervisoso, cazando y haciendo que la castañuela se lance contra mi, creo que les hago sentirse seguras
, entran tres doradas y una de ellas se llevará un tiro lejano que le da en la cola y se enroca, bajo a por ella y listo, me hago con un bonito y variado pasador y probablemente uno de los días que más he disfrutado del mar desde hacía tiempo.
Os dejo fotitos.