Aquí os dejo un lance bonito en agua cristalina en el que capturo un bonito mero.
Bajé a mirar una laja que resultó no tener boquete y como las castañuelas estaban bajas decidí empalmar con una espera. Para mi sorpresa se me apareció el mero delante y pude disparar antes de que girara.
Fue un subidón enorme y el único pez de un día que olía a porra...
Dar con ellos es muy muy complicado y más en tan a poca agua y en pleno verano con el tráfico salvaje de barcas ,motos, botelleros y pasea-guiris.
Espero que os guste!