Lo que dice Pau es CORRECTO (Coño Pau, por una vez estamos de acuerdo, no ? ). El promedio de mis apneas es precisamente 1 minuto y medio y las profundidades a las que pesco "cómodo" son entre 15 y 22 metros.
Vaya marco tienes 25 años ya de experiencia? eres todo un maestro en esto jeje tus consejos siempre son acertados.. ahora si que tengo que mejorar poco a poco mi apnea hasta llegar al min y medio, pero me imagino que tiene mucho que ver con la energia que gastas al bajar.. por ejemplo si te esfuerzas mas en bajar, no vas a poder hacer una espera larga en el fondo.. la cosa es.. utilizas la teoria de dejarte caer luego de los 8 metros? por la flotabilidad negativa?
Me haces sentir más viejo de lo que soy....
Te explico bien cuál es mi técnica antes de hacer una bajada para una espera. Ya lo he dicho por aquí, pero pienso que no está de más para los noveles. Se trata de ahorrar energía en todas las facetas:
Esto lo tengo ya escrito en "Mi libro" (que no sé si algún día publicaré)
Respiración: Se trata de respirar profundamente utilizando todo el volumen de tus pulmones para oxigenar bien la sangre y bajar tu frecuencia cardiaca. Puedes también utilizar otros métodos de relajación (cada uno tiene el suyo) como entrecerrar los ojos, visualizarte en el fondo, "ver" el aire que entra a tus pulmones de tu color favorito y sale del color que menos te guste, etc.... Es importante estar correctamente lastrado para evitar hundirte mientras respiras, pero tampoco quieres flotar como un corcho en el agua. A mi me gusta estar negativo a íƒÆ’í¢â‚¬Å¡íƒâ€ší‚¼ de la profundidad que voy a bajar.
NUNCA hiperventiles. No mejorará tus apneas, solo hará que no sientas las contracciones del diafragma que te hacen querer respirar y además acelera la frecuencia cardiaca disminuyendo tus tiempos. Nada como una buena relajación antes de bajar.
Bajada: Un buen golpe de riñón te hace ganar unos 3 metros ya de entrada. Luego yo doy unas 3 o 4 patadas amplias y me dejo caer inmóvil, concentrándome solamente en compensar y relajar cada músculo de mi cuerpo. Voy pasando lista: Cuello, lengua, piernas, brazos y así. Trata de no mirar el fondo. Esto te ayuda en tres aspectos: No te estresas sin necesidad al notar que te falta todo ese recorrido, no frenas la bajada por una posición no-hidrodinámica y no contraes los músculos de tu cuello y espalda, que gastan oxígeno precioso. Trata de que tu silueta esté lo más recta posible y que penetres el agua como una aguja. A mí me gusta sacarme el tubo o Snorkel de la boca antes de comenzar a bajar por dos razones: la posición de la boca sin nada es mucho más relajada y no tienes que hacer el esfuerzo de soplar el agua para afuera cuando emerges.
Espera: Adopta una posición cómoda apuntando tu arpón hacia donde la intuición te diga que vienen los peces, o con la corriente a tus espaldas o con el sol a tus espaldas. Mantente inmóvil, las aletas pegadas al fondo (esto es importantísimo) y mira de un lado a otro muy lentamente. Si ves alguna pieza interesante que no te entra, no te preocupes, sube sin mostrar agresividad y alejándote que probablemente la vuelvas a encontrar. Con determinadas especies tienes que ocultarte, con otras al contrario, puedes hacer una espera en medio de la arena al lado de unas rocas, donde te puedan ver bien. Ya aprenderás. Alterna las dos.
Ascenso: Despégate del fondo sin hacer mucho ruido ni levantar mucha suspensión. Yo me doy un empujón con la mano libre y luego comienzo a aletear. Doy unas 3-4 patadas amplias y vigorosas y luego me dejo subir casi sin aletear. La subida es la etapa más crucial de una espera; los síncopes ocurren todos a unos 3 metros de la superficie. No mires hacia arriba, quizás puedes dar una mirada para ver si no hay obstáculos, pero luego pega tu barbilla al pecho y relájate. Trata de íƒÆ’í‚¢íƒÂ¢í¢â‚¬Å¡í‚¬íƒâ€¦í¢â‚¬Å“sentiríƒÆ’í‚¢íƒÂ¢í¢â‚¬Å¡í‚¬íƒâ€ší‚ el agua y de ofrecerle la menor resistencia posible.
Practícalo primero a profundidades que te sean ya cómodas y verás que tus tiempos aumentan y tu comodidad también. Luego, poco a poco y SIEMPRE con supervisión desde arriba, puedes ir bajando un poquito más.
La pesca a la espera es la que más muertos cobra, porque se hace sin los cuidados debidos y porque las sensaciones son tan buenas que uno puede llegar a olvidarse que tiene que respirar. La visión de un buen pez puede también hacernos olvidar de subir o querer aguantar íƒÆ’í‚¢íƒÂ¢í¢â‚¬Å¡í‚¬íƒâ€¦í¢â‚¬Å“un poquito másíƒÆ’í‚¢íƒÂ¢í¢â‚¬Å¡í‚¬íƒâ€ší‚Â. Ese pez u otro más grande va a volver. No vale la pena arriesgar. Esto se debe tomar con mucha madurez para evitar sustos o tragedias.
El equipo también es muy importante para tener éxito en este tipo de pesca; unas aletas que nos impulsen bien sin llegarnos a cansar, un traje que nos permita sentirnos cómodos, una máscara con una visual amplia y que no requiera demasiado aire para compensarla y un arpón con un buen alcance. Lo ideal es hacer disparos cercanos, pero a veces los peces se quedan al límite y hay que hacer tiros lejanos. Debemos tener la posibilidad de subir sin nada que nos frene; un buen carrete que nos permita recuperar la presa desde la superficie o tener el arpón amarrado a la boya mediante un íƒÆ’í‚¢íƒÂ¢í¢â‚¬Å¡í‚¬íƒâ€¦í¢â‚¬Å“Float-lineíƒÆ’í‚¢íƒÂ¢í¢â‚¬Å¡í‚¬íƒâ€ší‚ con la suficiente longitud para que no entorpezca nuestras bajadas.
Suerte y ya me contarás