entran a muerte. Eso sí, después que le sacas uno o dos al cardumen, los grandes se mantienen a distancia o simplemente desaparecen.
Precisamente, entran a muerte los hijos menores, los hermanos mayores que son los interesantes "pasan" de nosotros. Y con el neumático siempre será más jodido apuntarle bien a uno no tan grande, porque lo tapas y no me gusta rasparlos en vano. Eso sí, a veces se suicidan, pero eso cada vez está más difícil
Hay una gabarra entre Cubagua y la Península de Araya, honda eso sí, que es una mina. Hay han sacado los que pescan con botellas de aquí pargos dentones de 12 kilos, que ya dejaron de ser "parguetes" hace años.
José Manuel: coño, ahora estás aquí mismo. íƒÆ’í¢â‚¬Å¡íƒâ€š¿Cuándo salimos a ver si te mostramos unos sitios?
Con relación a Carbonell y los guasinucos grandes... que ya es una proeza pornerlos a tiro, se demuestra que
con estos peces (si no deciden suicidarse) no sólo es importante el indio (es indudable que Carbonell ES otra cosa) sino la flecha... neumáticos o dobles gomas... eso ya lo sabíamos
. Lástima que no se les encuavaron, que ahí sí los mata un indio de éstos con un gancho de ropa desdoblado. Y en un cardumen es un peo además, porque si uno sólo de ellos (generalmente fuera de nuestro campo visual) comienza a "explotar" ahí sí se pone jodida la cosa. Hay que ser bueno mismo. De todas formas, así les quedan las ganas de volver, aunque igual vienen al mundial y tal vez hasta se harten de matar guasinucos.
Saludos
Alexis