íƒÆ’í¢â‚¬Å¡íƒâ€š¡Haya pez!... digo... íƒÆ’í¢â‚¬Å¡íƒâ€š¡Haya paz!.
Todos tenemos razón y ninguno.
Estoy de acuerdo con los planteamientos de Memo y Victor. Supongo que, para no recargar el post, se tiende a simplificar. Evidentemente, el pistón viaja con la flecha y se pierde energía símplemente en desplazarlo a lo largo del tubo (trabajo físico) y empujando la flecha en su recorrido. La superficie del pistón actúa de freno dinámico. La diferencia es sobre qué medio se mueve el pistón. Si el fluido es aire, la resistencia será muchísimo menor que si el fluido es agua o algo más denso. íƒÆ’í¢â‚¬Å¡íƒâ€š¿Cuánto influye eso en el disparo?. Sinceramente, no lo sé. No he estudiado las armas del lado oscuro pero, influir, seguro que influye (así como la corredera y resto de elementos que abultan y pesan).
Aunque el fusil mantuviera una fuerza de empuje constante, eso daría una aceleración constante y, esto significa que la velocidad se iría incrementando en la misma proporción en un mismo periodo dado de tiempo (p.ej. cada 0,001 segundos). Se parte de velocidad cero y vamos sumando. Por ejemplo, con una aceleración de +2 m/0,001s, las velocidades irían creciendo: 0, 2, 4, 6, 8, .... hasta alcanzar la máxima velocidad de la flecha.
Esto puede explicar la sensación de Marco, viendo como la flecha abandonaba lentamente el fusil.
Esta misma sensación la he experimentado yo con un Totem 100, con una goma de 17,5mm. Me dió tiempo a ver cómo la flecha iba cogiendo velocidad en el tubo, así que entiendo perfectamente a lo que se refiere Marco (confirmo que no está loco o lo estamos los dos
).
A Victor, le ha faltado indicar que el Peso es también una fuerza importante en la ecuación, es el principal causante de la caída de la flecha (además del efecto hidrodinámico de aletillas sobredimensionadas, montadas abajo y, además, con la punta doblada - fantástico alerón. El que no se lo crea, que coja un avión de papel y le haga un alerón en las alas, a ver qué pasa).
Sobre qué hace que una flecha vuele más o menos tiempo y a mayor o menor distancia, no es ni la masa, ni la velocidad, sino la inercia de la flecha (p= m * v, es decir: ambas cosas). Para frenar la flecha, será necesario que una fuerza F actúe durante un tiempo t (m * v = F * t). Como se puede ver, dada una inercia de la flecha, será necesario un valor de "contra-inercia" similar para detener la flecha. La fuerza que principalmente se opone es la del rozamiento del agua. Si esa fuerza es muy grande, la flecha volará muy poco tiempo. Si esa fuerza es muy pequeña, la flecha volará más tiempo. Puesto que el rozamiento depende del cuadrado de la velocidad, podría darse la paradoja de que una flecha de mayor masa, lanzada a menor velocidad volara más tiempo y más lejos (y conservara mayor energía en el impacto) que una flecha menos pesada lanzada a mayor velocidad. El problema es determinar la frontera: la relación masa/velocidad más efectiva en cada caso.
En balística, es prácticamente imposible adivinar dónde estará un 'proyectil' en un instante determinado. El problema es tan serio que lo máximo que se puede hacer es aproximarlo, mediante complicadísimas fórmulas físico/matemáticas que, además, deben de apoyarse en una base de datos que contiene el "Coeficiente de arrastre" de cada proyectil, obtenido solo tras muchos ensayos (los ordenadores que realizan cálculos balísticos militares son de lo más sofisticado del mercado).
El coeficiente de arrastre es un dato obtenido de la experiencia que permite aproximar mucho los cálculos y depende primordialmente de dos variables: la forma del objeto (que marca su comportamiento en un fluído y su resistencia) y la velocidad con la que viaja. A partir de cierta velocidad, el coeficiente calculado para cierto objeto es absolutamente inservible y hay que utilizar un nuevo coeficiente, puesto que el objeto se comporta de forma totalmente distinta a altas velocidades. Evidentemente, el coeficiente es también distinto para cada fluido en el que viaje el objeto.
La forma influye en las turbulencias que menciona Victor, que tienen un impacto importante en el vuelo de la flecha y en el resto de fuerzas contrarias. La misma varilla con distintas puntas, con distintas aletas, con distintas colas, con tetones, puede comportarse mejor o peor.
Creo sinceramente que es el componente del equipo de pesca que menos ha evolucionado. Claro que, el coste de investigar mejoras en el comportamiento dinámico del proyectil puede ser excesivamente caro (tuneles de viento, ...), teniendo en cuenta el limitado mercado de la pesca submarina (muchísimo menor que el botellero, por ejemplo).
Como en todo hijo del ingenio, optimizar una herramienta para algo concreto suele des-optimizarla para otras cosas. Por ejemplo, los tetones facilitan la carga y, posiblemente, estabilizan el vuelo pero... afectan negativamente al poder de penetración de la flecha (constatado en pruebas en piscina).
Existen dos dimensiones para valorar un conjunto fusil (fusil, flecha, gomas, etc, etc):
- Objetiva: pruebas en las que no interviene el hombre y que son mesurables mediante equipos bien calibrados. Eso puede demostrar que un equipo es, a priori, más preciso, más potente que otro.
- Subjetiva: Independientemente de las propiedades intrínsecas del equipo, está nuestro "feeling". Es posible que el equipo técnicamente mejor sea el que menos nos conviene. Por ejemplo, el equipo puede disparar con una precisión increíble en un potro de pruebas pero... una vez en la mano... puede tener tanta flotabilidad que nos cueste "encontrar" el punto negro de la diana. Además, no todos corregimos el error del arma de la misma forma y, algunos, seguro que tenemos mal "la computadora balística del cerebro" y preferimos disparar con una escopeta de feria, en vez de con un arma de tiro olímpico.
Yo también animo a Josetxo a que haga esas pruebas y las estoy esperando como agua de Mayo.
Hay tantas cosas que se pueden probar:
- Mantener todos los elementos, cambiando solo el fusil que dispara
- Con la misma flecha, disparar distintos fusiles, tal y como vienen de serie.
- A partir de la misma varilla (longitud, diámetro, cola), variar el diseño de la punta, la aletilla (longitud, forma)..., probar con alerones, con la superficie inferior plana (un milímetro de ancho).
- etc, etc, etc
En fin. A ver si mejora el tiempo y vamos más a la mar.