Un extremeño quería ser vasco y para ello acudió al médico.
- Buenas doctor, que quería ser vasco.
- Y eso?
- Pues no sé, porque tienen más repercusión social, son una raza noble y fuerte ...
- Pues ... qué quieres que te diga, yo también soy extremeño,vas a tener que ir a un médico al
País Vasco.
Y así lo hizo nuestro amigo, fue a ver a un médico vasco.
- Buenas doctor, que quería ser vasco.
- No hay problema, es una sencilla operación. Lo único que tenemos que hacer es aumentarle el tamaño de sus cojones. Pero no se preocupe, ya lo hemos hecho muchas veces, no hay ningún peligro.
En el momento de la operación se dieron cuenta que le habían puesto unos cojones demasiado grandes, el doctor asustado comenzó a gritar para despertar al paciente.
- Despierte! despierte!
- mmm ... si?
- ¿Esta usted bien?
- Calla hó!, cagoní‚´mi manto, toi de viciu !!! Esto ye la hostia, pon un culín de sidra y unes fabes, que toy muertu fame.