Esta mañana fue mi último remojón del año, un día precioso aunque el pescado de escama brilló por su ausencia. A falta de sorpresa se cumplió mi pronóstico de última captura del 2014, un buen zafío para disfrutar con la familia. Ando con la camarita como un niño con juguete nuevo así que os dejo un par de fotogramas de la culebra.
Un saludo