Esta manana pensando que iba a dar tregua el ponientazo que lleva soplando 3 dias, quedé con los dos amigos llamados Chris para una salida.
Al ver que no habia parado el viento cambiamos el plan original y nos fuimos a un lugar mas resguardado para probar suerte.
Fuimos a una barra conocida pero la corriente iba en dirección opuesta a como suelo pescarla pero ya que estabamos nos metimos. La primera bajada me cubre un manto de alevines de jurel y desde arriba de la barra comienzan a bajar muchas lisas. Entre ellas diviso dos robalos de buen porte que no parecen interesados en mi. Depronto comienzan a correr los alevines las lisas y los robalos. Pienso que viene algo gordo gordo pero cuando miro hacia arriba veo a mi compi chapoteando en superficie
Un par de bajadas mas y nada. Con esta marea no se adonde probar y vamos tocando punto por punto y seguimos con todas las papeletas de porraca
El agua va enfriando conforme avanza la vaciante y para medio dia estabamos los dos muertos de frio. Ibamos a volvernos y como la barra original pillaba de camino, les digo, dejarme aqui que voy a bajar de nuevo, pero ni ruido ni os acerqueis hasta que os llame
Me preparo bien y bajo bastante retirado de la barra y hago un largo acecho hasta una roca que está en la sombra de la barra. Ahi me espero. De nuevo los alevines y las lisas. Pero los robalos no los veo. Aguanto un poco mas y veo como empiezan a correr hacia la superficie los alevines. Por el fondo llegan 4 barrotes de plata a toda hostia y sin apercatarse de mi presencia comienzan a nadar en un circulo en la base de la barra. Eligo el gordo y cuando me pasa a unos 3m de la punta le pego un zambombaso detras de la agalla dejandolo casi frito!
A veces no desistir tiene sus ventajas