Ya se había hecho un poco tarde esta mañana para lo que tenía planeado así que tuve que improvisar una salida en una zona cercana con un recorrido cortito, me decido por una pequeña punta orientada hacia oeste y que se puede recorrer de norte a sur o al revés según convenga. La marea está demasiado baja y sopla un viento norte fresquito por lo que decido entrar por el lado norte para no hacer un esfuerzo innecesario.
Voy encadenando una serie de acechos cortos terminados en esperas en el límite entre la piedra y la arena sin mucho éxito, hasta que al doblar una esquina me cruzo con una hermosa dorada que se pasea tranquilamente ignorando mis intenciones. Se dirige a la zona hacia donde tengo apuntando el fusil, y me limito a esperar a que llegue, y aunque me distraigo un poco con la escena no me olvido de disparar, la pieza cae al fondo a plomo, se nota que esta vez la varilla estaba afilada como un aguja, la atravesó dos veces...
Lo sigo intentando pero no vuelvo a ver nada decente, bueno un pinto y un sargo pero no me combinarían nada bien con lo que ya colgaba en el pasador...
Finalmente pesó 2,54 kg, nada espectacular pero es mi mejor marca personal del año y de todos los tiempos, supongo que eso explica el porqué cuando llegué al coche estaba tarareando la de paquito el chocolatero
