Un día de los que no se olvidan fácilmente, la primera espera la hago en el coche, sí, es verano
y tras casi media hora de espera veo como unos turistas ataviados de sombrillas, neveras y niños se dirigen a un coche...primera captura hecha, un sitio para aparcar a menos de un km del agua
Me tiro al agua y activo todos los sensores para detectar en cada subida y cada 2 minutos todo lo que te rodea, no hace falta que detalle la fauna de superficie
Llego a la zona de pesca y el agua es verdosa y con corriente, hay bastante vida de comezón pero no se ve movimiento de depredadores, en una de las bajadas me entra un banco de dentones pequeños y decido pillar uno para asegurarme la cena.
Sigo pescando y en unas piedras que conozco hago un acecho y me asomo despacito a unos agujeros antes de posicionarme para hacer una última espera, pues justo en esa visera hay dos corvas, una sale por patas y la otra tarda en reaccionar lo suficiente para poder encararla y llevarse un disparo de esos que actúa el brazo y el dedo de forma automática y aunque el tiro es de agalla a cachete, consigue enrocarse y toca bajar a sacarla, una preciosa corva que se suma a la boya.
Siguiente bajada, a media agua empiezo a ver el fondo y justo donde estoy cayendo hay un bonito pulpo tomando el sol encima de la piedra, que mala suerte tienen algunos
(en Comunidad Valenciana es legal) solo tengo que estirar el brazo igual que coges algo en un supermercado y uno más que cuelga en la boya.
Ya con lo que tengo en la boya voy rozando el cupo, así que decido perdonar varias corvas que me voy encontrando por el camino, y de buena talla, pero con sólo una más cubría el cupo seguro y prefería guardar el tiro hasta llegar a una zona por si estaban allí los dentones.
Pues llego a la zona donde esperaba ver a los dentones y......nada, no hay ni un alma
pero digo, ya que estoy aquí voy a ver aquel otro punto, preparo la bajada bien pegadito a la pared, veo los sargos bajando por la pared lentamente y desaparecer en el fondo, hay un poco más de corriente que antes y ha limpiado un poco, empiezo a bajar sin ninguna prisa, siguiendo el fondo de la pared hasta llegar a un conjunto de piedras, hay unas corvas en la boca de la grieta que al verme se esconden de forma ordenada como una fila de niños en el cole, estoy bien escondido, cómodo, con unas preciosas vistas a castañuelas, mojarras y alguna corva que se asoma de los agujeros de las piedras para ver si sigo ahí, cuando de repente, por mi flanco izquierdo me aparece una auténtica maravilla, decidido gira y hace una pose para verme que deja que vea su poderosa silueta, un animal muy noble, que me recreo, aunque en el momento piensas que es un buen rato, después en el vídeo ves que es todo mucho más rápido, apunto cuando ya ha saciado su curiosidad y está girando para cambiar de rumbo, disparo y el tiro le parte la espina dejándolo temblando en el mismo lugar del impacto, toca recuperarlo desde superficie, rematarlo y disfrutar de tan bello animal.
Salió bien lo de guardar tiro, ahora a honrarlo con la familia y amigos en la mesa
Os dejo unas fotos: