Un submarinista vigués captura un gran ejemplar de este pez en aguas de Sanxenxo con un peso de veintidós kilos
Rafael Otero con la raya capturada en la Ría de Pontevedra. FdV
S. REGUEIRA. Un pulpo de 15 kilos que apareció el pasado día 28 en la playa de Aguete y este fin de semana una raya de 22 kilos.La Ría de Pontevedra no deja de sorprender a los aficionados a la pesca, que todavía se preguntan cómo es que este tipo de ejemplares han podido sobrevivir hasta alcanzar esos tamaños.
El protagonista de la más reciente captura es Rafael Otero, natural de Sanxenxo y afincado enVigo desde hace 22 años y que desde muy joven ha practicado la pesca en la Ría de Pontevedra. Director administrativo financiero de una empresa de materiales de construcción, asegura dedicar la gran mayoría de su tiempo libre a disfrutar de las aguas del litoral pontevedrés.
"Llevo muchos años pescando en Sanxenxo",explica. "El domingo mi hermano y yo llegamos a la playa de Areas sobre las nueve de la mañana, cogimos varios pescados de costa y en un momento ví a la raya a unos 10 metros de profundidad, al principio no la distinguía con claridad", relata.
La capturó alrededor del mediodía, si bien en un primer momento dudó de que fuese una raya (por su tamaño le parecía una manta) y desconfiaba de que fuese finalmente comestible. "Es muy infrecuente un ejemplar con ese tamaño en la ría de Pontevedra", explica Rafael Otero, que tras situar en la báscula al pescado comprobó que pesaba 22 kilos,"así que al principio no tenía claro ni qué especie era realmente ni si podría comerse". A fin de resolver sus dudas el submarinista decidió trasladarse hasta Portonovo, que celebraba precisamente el "día grande"de la Festa da Raia, y consultar a los pescadores más veteranos.
"Pregunté a los marineros y a la gente de la lonja y me dijeron que era comestible", explica Rafael Otero,"pero todos se sorprendieron por el tamaño de la raya". Una vez en casa lo más complicado fue, según explica el pescador, "quitarle la piel, porque es muy engorroso,pero una vez trocada la carne se parece a la de un pavo casero o la de un lechón".
Reconoce que le intrigaba cómo resultaría su flamante captura en el plato y ayer mismo decidió probarla. La preparó cocida y con ajada y asegura que al paladar "es un poco más seca que otras carnes de raya que he probado, menos cartilaginosa pero de todos modos sabrosa".