El cancerbero del abismo
Toni Lodeiro, portero del Azkar, se lanza al mar en aguas de A Coruña para cultivar su gran pasión en cuanto el deporte se lo permite: el submarinismo a pulmón y a botella
Autor:
Marcos Pichel
Fecha de publicación:
26/10/2009
![](http://media.lavozdegalicia.es/default/2009/10/26/0012_2645620/Foto/g26p50f3.jpg)
Con la misma facilidad que emplea para detener los balones envenenados de los pívots rivales, Toni Lodeiro, portero del Azkar, se lanza a las frías aguas del Atlántico. Convierte esa última frontera que para muchos es el mar en un territorio conocido. Hay fondos, como los que rodean el tómbolo de A Coruña, que conoce como la palma de su mano. El submarinismo no tiene secretos para él, bien a botella o a pulmón. En este último caso, fusil en mano, maragotas, pintos, lubinas (su récord, cuatro kilos y medio) o congrios (de 14,5 kilos) se preparan para acabar en la cazuela.
Cuando tiene ocasión, y sobre todo, cuando una profesión como el fútbol sala se lo permite, encuentra un hueco para vestir el buzo de neopreno y zambullirse. Casi siempre, en vacaciones. í‚«Es una afición que tengo desde que era pequeño. Veía a la gente en la playa, mi abuelo era marinero, y quieras que no...í‚», cuenta el jugador, que obtuvo su primer título de buceo con botella en el año 94, y que a pulmón es capaz de pasar casi tres minutos bajo el agua y bajar hasta los 17 metros. Incluso ha contagiado a antiguos compañeros como el ex capitán del Azkar, Fernando Regueira.
También en aguas calientes
Toni Lodeiro ha probado también en las aguas del Mediterráneo, en Menorca. í‚«Es muy diferente, el agua está mucho más caliente, y es mucho más claraí‚», dice. Y recomienda las inmersiones nocturnas, siempre con botella y armado con una linterna: í‚«Son realmente espectacularesí‚».
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