Pues está claro que el verano da más pescadito. Me he tirado todo el invierno buscándolas y nada. Y este veranito parece estar más animado.
Ayer me querían matar. Despues de más de un mes sin pescar, las preciosas damas blancas me putearon al más puro estilo dentón, manteniendose fuera del límite de disparo y visibilidad pero dándome vueltas. Se conoce que las han tocado este mes. Llegué a hacer 1.44 de apnea, cerca de mi record sin conseguir que me entraran, y con lo quemado que estoy de tanto beber, comer y fumar, pues subía con chiribitos en los ojos.
Al final pillé una de 1.300, una de 900 y otra de 780.