Pues eso, ayer nos tiramos un rato con Fernando (ya se está haciendo aburrido, no?
) y con dos veteranos de la pescasub en la Isla; Jorge Rodriguez y Mike Pizarro.
Fuimos a un punto que tenemos con Fernando y la verdad (aquí voy a sonar como Coronil
), aunque no había mucho movimiento, se hizo la pesca.
Nada más tirarme al agua y un pámpano me sube desde el fondo derechito a mi. Debe ser la crema olor a coco que uso para ponerme el traje
. Cargo una sola goma, le bajo unos 2 metros (SIEMPRE fallo cuando tiro desde la superficie!
) y le doy en la mitad del cuerpo. Ya se estaba alejando y no quise arriesgar a que se volteara.
Otra bajada y veo un capitancito de buen porte que revolotea en el fondo y también se viene....
La corriente estaba fastidiosilla y decido ir a dejar los peces al bote y moverlo más cerca de nosotros.
Al tirarme al agua, veo a Fernando con un lindo pargo. Luego coge otro con el que le devuelvo un favor que le debía de la semana pasada
. Creo que fueron los dos únicos pargos que andaban por ahí. Nos cansamos de buscarlos y nunca los vimos.
Luego apareció una sierra grande dos veces; una a Fer y otra a Mike, pero ninguno pudo dar cuenta de ella.
Ahora el lance con el protagonista de esta historia:
Antes de contarlo, tengo que decir que hace unos meses nos tuvo vacilados a Fernando y a mi por casi toda una jornada; le bajábamos y se metía en una cueva. Apenas comenzábamos a subir, salía de la jodida cueva. Una y otra vez... Así nos tuvo por unas 15 bajadas cada uno, hasta que lo indultamos.
El cuento: Ventilo muy bien y bajo para hacer una espera en un fondo de arena a 20 metros de profundidad. No llega NA-DA. Comienzo a hacer mis "ruiditos" y lo veo a lo lejos como se va acercando para detenerse justo antes de entrar a "tiro confortable" de mi 130. Me escondo detrás de un "abanico" y se acerca un poquito más, pero no lo suficiente. Entonces se gira y comienza a alejarse lentamente. Pienso rápido y me empujo con mi mano izquierda para ganar ese poquito que me falta. Tiro a la mitad del cuerpo (a contra-escama) y veo como la varilla lo pasa de lado a lado. Suelto todo y subo por aire! Al final serían casi 2 minutos (nada espeluznante), pero se me hizo laaaaargo....
La recuperación es fácil y al tenrlo en mis manos veo que es GRANDE el condenado. El más grande de su especie que haya sacado.
Me acordé que no hace mucho un muchacho de Puerto Rico registró un Récord mundial y según la foto no era mucho más grande (o NO era más grande) que el mío.
Juzguen ustedes:
El mío:
El récord:
http://www.iusarecords.com/display_record.php?id=350
Ah! por cierto, se me olvidaba, los pargos de Fernando...
