Una ley para una pesca rentable
La nueva norma que regulará esta actividad productiva en el Archipiélago persigue frenar el abandono progresivo de la misma dándole protagonismo en el giro económico que promueve el Gobierno autónomo, que quiere dar más peso al sector primario.
7/oct/09 07:38 JOSUíƒâ€° GARCÍA, S/C de Tfe.
"La pesca necesita ser rentable en el tiempo, y eso sólo se logrará si somos capaces de mantener sus recursos y no ejercemos excesiva presión sobre ellos. Reduciremos el esfuerzo pesquero si es necesario para mantener el sector. Habrá prioridad para el segmento extractivo, pero intentaremos que el resto, que no son profesionales, lo disminuya", destaca el viceconsejero autonómico del área, Francisco López, al referirse a las restricciones que impondrá la nueva Ley de Pesca de Canarias, aún en fase de elaboración.
"La vigente es de 2003 y cuando se elaboró no se tuvieron en cuenta condicionantes que se dan ahora", explica López en alusión a las motivaciones de la nueva normativa. En especial, señala, habrá una simplificación normativa que atañe a las concesiones acuícolas "para que no haya que sacarlas a concurso constantemente".
Pero también la mueve el objetivo de impulsar la pesca tradicional. "Intentamos ampliar el número de personas que se dedican a ella", subraya el viceconsejero, en el cargo desde finales de octubre del año pasado. Para conseguirlo, la ley incidirá en "concienciar a los canarios de que el mar debe ser como la tierra. No es sólo la lámina de agua que vemos; debajo hay una flora y una fauna que no podemos desproteger" por cuestiones medioambientales y, al mismo tiempo, económicas.
"En este momento tenemos alrededor de 1.000 barcos pesqueros, y por cada trabajador en mar hay cinco en tierra", destaca a modo de "fotografía" del peso actual del sector en la economía autonómica, aunque también como dato clave para entender su potencial de arrastre y generación de empleo.
De los puntos destacados de la futura Ley autonómica, López cita el endurecimiento de las sanciones y el refuerzo de la inspección pesquera, una demanda tradicional de las cofradías. "Se crearán tramos de multas, tanto para los pescadores profesionales como para los deportivos, ya que en estos momentos sólo hay un máximo y un mínimo. La próxima ley las fijará escalonadamente", lo que aumentará su eficacia.
Inspección más eficaz
"Asimismo, dotaremos a la inspección pesquera de la posibilidad de incautarse, dándole armas para que su trabajo sea más eficiente y que las actuaciones sean las menos posibles. Quien se aventure a cometer una infracción debe saber que el precio que va a pagar no es irrisorio, sino algo que de verdad le va a doler en el bolsillo", argumenta el viceconsejero.
Los inspectores incidirán especialmente en las "redes de comercialización de la pesca furtiva", agrega López, que pone de relieve que "si no hay supermercado, pescadería o restaurante al que vender el producto, los furtivos acabarán dejando de ejercer esa actividad. Hay que cortar esa línea".
Para lograr tal objetivo, "y como los medios de la inspección pesquera no son todos los necesarios", los efectivos habituales se apoyarán en la Policía Local, de modo que ésta "sea un inspector más y haga batidas informativas. Luego llegará el turno de las denuncias por parte de la Viceconsejería".
La futura ley también incluye un apartado "prioritario" sobre la "pesca-turismo", añade, para buscar nuevos atractivos en el principal sostén de la economía isleña y otra herramienta para que los pescadores obtengan ingresos.
Además, aumentarán las restricciones en la pesca deportiva -"fijaremos una serie de límites", señala López- y se extremarán las precauciones en otra actividad recreativa, el buceo.
La mayoría de estas medidas se destinan a favorecer la pervivencia de un sector venido a menos, pero que la Consejería del área considera igual de válido que el resto de las actividades primarias en el giro económico que promueve el Ejecutivo autónomo.
Establecer vedas
Con esa meta, el departamento que dirige Pilar Merino tratará de "acercar" los institutos marítimos pesqueros al resto de islas (están ubicados en Tenerife y Lanzarote) para favorecer la formación de nuevos profesionales, un objetivo para el que buscará la colaboración del Servicio Canario de Empleo, señala el viceconsejero.
"También -añade- abrimos una línea de subvención específica con fondos comunitarios para modernizar buques, y en 2005 el Ejecutivo autónomo abrió una convocatoria para la construcción de nuevas embarcaciones".
Pero, para que todo ello resulte, será vital que se conserven los recursos actuales, "algunos más agotados que otros". La Consejería creará una comisión de trabajo en la que participarán científicos y las cofradías, además de la Administración, que "intentará plasmar en realidades las recomendaciones del seminario que se celebró el pasado noviembre -"Estado de los Recursos Pesqueros de Canarias (Repescan)"-.
A la espera de que dé frutos, entre las aportaciones que ha recibido el proyecto legislativo figura la solicitud de que se establezcan turnos, como en la caza. López, que indica que "se va a valorar" la iniciativa, matiza que "el mar no es lo mismo (que el monte), ya que habrá días en los que, por su estado, no se podrá salir a pescar".
Más abierto se muestra a establecer vedas "parciales o totales, permitiendo sólo la pesca con anzuelo o prohibiendo totalmente la actividad si, por ejemplo, se trata de una zona de desove de pescado". Es una medida que se sumaría a las tres reservas marinas actuales y a las otras tres, éstas en aguas exclusivamente interiores, que están proyectadas, la primera en el Confital de Las Palmas.