Como alguno me ha pedido que ponga alguna foto de algún pez cazado con un Rollergun voy a hacer algo más; pondré esto que colgué hace unas semanas en otro foro. Como sé que algunos ya lo habéis leido os pido disculpas por repetirme. También deciros que ya soy demasiado mayor como para grandes gestas y que hago humildemente lo que buenamente puedo. Además donde yo vivo tenemos absolutamente prohibida la práctica de apneas en las piscinas (empezando por el foso de buceo del cuerpo de bomberos que fue donde se originó todo el follón por culpa de algunos que quisieron imitar, sin tener ni puñetera idea, a uno que hacía apneas de 5 minutos con las consecuencias que os podéis imaginar) con lo que mi entrenamiento es cero: me meto en el agua de año en año.
Pero, aún así y una vez pasada la primera semana de agonía, aún me defiendo.
..."Con semejante mono de pesca he decidido, para recordar vívidamente cerrando los ojos y trasladándome allí, contaros someramente algunas anécdotas vividas en Sao Tomé. Con los años uno aprende en los viajes de pesca submarina a apreciar otras cosas además de la emoción por conocer fondos desconocidos y peces distintos con los que uno medirse.
Hartos ya de esos viajes de 48 horas (con tres vuelos hasta llegar al sitio), tanta ola, y tanto tiburón y tanta botella que arrasa con todo el pescado que no es de paso, se decidió en 2007 cerrar el chiringuito en Tarrafal e ir un poco más al sur: Sao Tomé. Mucho menos viento, viaje más corto y más barato ¡Carpas rojas!... aunque esa decisión se tomó unilateralmente ya que el que manda, manda.
Me ahorraré los detalles del traslado; venta de embarcación semirrígida en Cabo Verde y recompra de zodiac plegable (que vendimos previamente a uno de allí), venta de coche y remolque, venta del container de 12 m (nuestro almacén), venta de electrodomésticos y traslado de la embarcación y del material a Sao Tomé.
Una vez llegados allí, la sensación de poder morir violentamente nos acompañó contínuamente hasta que dimos con nuestros huesos en la í¢â‚¬Å“Hacienda de Joao Carlosí¢â‚¬Â, que es algo así como ese sitio en el que todos hemos soñado vivir: El Paraíso.
http://www.rocasaojoao.com/roca.htm Encontramos ese sitio por pura casualidad tras recorrernos varias veces el perímetro de la isla para encontrar un lugar seguro desde donde botar. Desde allí, y a 40 minutos de taxi estaba uno de los sitios más pintorescos que he visto en mi vida: Praia Pesquera. Una aldea de 10 o 12 chozas hechas con tablas en medio de la jungla. Allí conviven cerdos, gallinas y personas: no hay agua, no hay electricidad; no hay nada, sólo una pequeña escuela que es la única construcción de obra que hay. La gente vive de la pesca y de la recolección de cocos, bananas, papaya, cacao y unos frutos como sandías de grandes y que, una vez cocidos, parecen y saben a pan. Pero esto está creciendo silvestre; no son plantaciones propiamente dichas aunque también las hay (y la gente que trabaja en ellas cobra 6 í¢â€šÂ¬ al mes). Algo totalmente anacrónico para unos urbanitas de pro como éramos nosotros allí. Al final les caímos bien al vecindario. Cada vez que llegábamos a Praia Pesquera era una fiesta; todos ayudaban e, incluso, discutían para ver quien tenía el honor de llevar algo de material a la playa, que estaba a unos 10 minutos de la aldea.
También nos esperaban al regreso.
Y luego, al regreso de la pesca, el cotidiano ritual de reparto de bolígrafos, cuadernos, caramelos, silbatos, gorras, cajas de lápices de colores, jaboncillos de propaganda ¡madre mía la que se montaba! íbamos muy surtidos de regalos.
El caso es que el clima ecuatorial es incompatible con la pesca sub. Y mucho peor en la estación de las lluvias fuertes (lo que allí cae hay que verlo para creerlo). Es alucinante la cantidad de ríos, torrentes, escorrentías, cascadas es un paisaje de la película King Kong. Jungla ecuatorial con la vegetación llegando a la orilla del mar, acantilados con cascadas, picos de lava increíbles y una bruma y columnas de vapor de agua interrumpida ocasionalmente por un sol brutal.
En esas condiciones el agua en casi todo el perímetro de la isla está como el chocolate; no ves la punta del arpón. Incluso la navegación es peligrosa por la cantidad de troncos y árboles que hay a la deriva.
Hay zonas en las que llueve menos y que están más expuestas a la corriente. Allí tienes 40 m de visibilidad (distingues la mancha de piedra de la arena). Pero donde está el pescado en cantidad es en las zonas de agua sucia. Aunque hay momentos del año en los en que se puede pescar ahí yo no he tenido esa suerte. Las veces que hemos intentado pescar en esos sitios no hicimos casi nada. Además hay tiburones que no los ves venir hasta que los tienes literalmente encima. Sobre todo enfrente de los ríos donde, curiosamente por efecto de la erosión, hay estructuras rocosas (de piedra caliza, supongo) con formas raras y recovecos muy interesantes Mal rollo. Hay muchos ataques de tiburón en las desembocaduras de los ríos. La gente se mete a pescar con el agua en la cintura y el pescado que van cogiendo lo llevan en un pasa-peces colgado del hombro y he visto a varios a quienes les faltaba un brazo y cuando he preguntado por qué había tanta gente manca (esto en Angolares) me han dicho que pescaban en el río
... y lo siguen haciendo.
Total que la mayoría de las veces nos hemos limitado a pescar en í¢â‚¬Å“Las 7 pedrasí¢â‚¬Â, que es un afloramiento rocoso a unos 5 km de la costa, bastante lejos como para estar a salvo del agua sucia casi siempre.
Es una zona muy pescada por los militares, quienes bajan con botellas y meten granadas en las cuevas donde hay carpas con el resultado que os podéis imaginar. Casi no se ve pescado de ningún tipo. Para ver algo hay que bajar bastante. A pesar de eso allí he visto un cardumen de carpas rojas desfilando despacio ante mí de ¿cientos? Una pasada. La más pequeña no bajaba de 20 k, las del montón unos 40 k y las monster no sé, quizá 100 kilos.
Esto es las 7 Pedras, y los de la piragua nos indican la dirección de una especie de guyot que ellos llaman "Pedra Branca"
Tuve la oportunidad de tirarle a una que ya la tenía fichada de días anteriores mejor dicho tenía localizado un covarrón donde yo ya había visto que se metían algunas (de 40 kilos para arriba, así que os podéis imaginar cómo era la cueva). Había que bajar la pared de fuera de í¢â‚¬Å“Pedra Brancaí¢â‚¬Â, que de 13 m caía a plomo hasta 29 y teniendo, a partir de 18 m, una visera. Debajo de esta visera la piedra hacía como una barriga hacia dentro y allí siempre había pescado; carángidos y carpas.
La pared vertical comenzaba aquí, justo debajo de la tortuga. La claridad del agua es total; aquí hay 14 m:
La marca de Pedra Branca es esta:
En el fondo estaba el covarrón. Cada vez que iba allí lo primero que hacía era bajar a la visera literalmente reptando por la pared de piedra, casi sin usar las aletas, y asomarme muy despacio En una de estas ocasiones ví una carpa enfilar al covarrón muy lentamente. Yo me dejé caer en rumbo de colisión separándome de la piedra y la tuve a tiro. O eso creí yo. El caso es que creyendo que la tenía cerca resultó que no era así lo que ocurrió es que era ENORME. Le dí con un arpón de 150 (Sea tec) que parecía ridículamente pequeño. Llevaba yo un vipper cobra con dobles gomas que tiraba bien. Naturalmente perdí el pez y el arpón; mi cabo de carrete no aguantó (¡de 3 mm!)
No fue la única carpa enorme que perdimos. Mi colega Bruno también perdió otra King-size. En el carrete él lleva nilon de desbrozadora de 2í¢â‚¬â„¢5 mm pero su carpa empezó a hacer quiebros entre las piedras del fondo, se trabó el nilon y se rompió con un ¡CLONK! que pareció una cuerda de piano. También hubo otras que se perdieron sin pena ni gloria, más pequeñas; entre 15 y 20 k , pero debido a los tiros tan largos que nos veíamos obligados a hacer no quedaban atravesadas Con un Roller no hubiera pasado eso pero tiene el problema del peso a la hora de facturar el equipo. Al año siguiente (2008) llevábamos uno pero no vimos carpas grandes, aún así probamos tiros largos con otros peces.
Carpas
Más
Este pez es un "lenguado cerdo" y es un pez anádromo que vive muy encuevado. Puede llegar a 6 - 7 kilos. Es curiosisimo
Un atún banana...
Barracuda...
Más...
Y aquí una carpa mediana. Estas ya no son rojas sino de color bronce
... 42 kilos.
Y habría mucho que contar... el año pasado nos pilló una especie de huracán que duró apenas media hora... y menos mal que pudimos echar el ancla. El accidente con el taxi al caernos por un barranco...
Ya disculpareis el tocho.
