No soy un experto en ciguatera aunque investigué mucho cuando mi hijo Franco estuvo enfermo. Yo también me enfermé, aunque no tan grave.
Las iguanas son vegetarianas. Tenemos unos lagartos que son carnívoros. De hecho, siempre me acompañan mientras limpio el pescado en mi casa, pero no puedo hacerles seguimiento a ver si les duele la barriguita o tienen escalofríos
La prueba que yo hago es comerme un trozo de 2 cm x 2 cm. Es suficiente para que a las 2 horas comience a sentir el estómago descompuesto y me dé una leve diarrea. Luego paso 1 semana con picazón en manos y pies cuando bebo alcohol y con la boca que me quema cuando bebo algo frio. Nada que no se pueda soportar. Prefiero eso a que alguno de mis hijos se vuelva a enfermar.
El problema es que una vez contraída la toxina, esta se queda alojada en el cuerpo y se activa con cantidades mínimas de la misma. A mí me ha pasado que un pescado que otros comen sin problema, me hace daño.
Hay especies totalmente confiables, otras í¢â‚¬Å“casií¢â‚¬Â confiables y otras í¢â‚¬Å“sospechosasí¢â‚¬Â. Ya sé cuáles son y tomo las medidas pertinentes. Hay especies que luego de cierto tamaño se convierten en í¢â‚¬Å“potencialmente peligrosasí¢â‚¬Â, otras que dependiendo de la zona se pueden comer o no.
Las huevas, en general, no pueden comerse. A menos que se trate de especies pelágicas como petos, dorados y poco más. La toxina se concentra en las vísceras y áreas más grasas.
En fin, no existe el mundo perfecto.