Hola amigos,
La semana pasada estuve por mi País y, como de costumbre, me eché al agua un par de horas ANTES de tomar mi avión a Puerto Rico.
Después de una DURA semana de trabajo, me fuí el Viernes en la noche a Laguna Beach, un condominio donde mi familia tiene un apartamento y donde prácticamente me crié en el mar (a mis hijos los metí en ese mar a las 3 semanas y dos semanas de nacidos, respectivamente).
Volviendo al tema, el Viernes en la noche, invitado por mi amigo Paco a comer un delicioso salpicón de atún aleta amarilla, me tomé un par de "gíƒÆ’í†â€™íƒâ€ší‚¼iskis" y planificamos con Manuel la jornada del Sábado: Echaríamos al agua el bote a primera hora de la mañana y pescaríamos hasta las 11 de la mañana, para luego yo, en operación comando, lavar mis equipos, vestirme y salir corriendo al Aeropuerto. Tenemos 4 puntos de pesca cercanos, de los cuales, la primera opción es un pecio sumergido a 27 metros de profundidad en medio de un fondo de arena y fango, que es un sitio de alta concentración de pescado; en los días "justos" pasan los petos por encima y mientras los esperas, se puede pescar de fondo practicamente todas las especies del Caribe. Es un sitio muy exigente, ya que además de la profundidad bien respetable, generalmente está barrido por fuertes corrientes y la visibilidad suele no ser de las mejores (los petos solo aparecen cuando la visibilidad es de más de 15 metros).
La segunda opción es un pecio menos profundo (15 metros), donde las piezas predominantes son las picúas y uno que otro pámpano y cebadal.
La tercera serían unas pirámides que hundió un centro de buceo antes de la "tragedia de Vargas" (mis compatriotas saben de qué hablo), donde se pueden pescar "Parguetes" y la última sería un malecón, donde hemos matado algunos guasinucos (mi primer guasinuco lo pesqué ahí en mis inicios
) y en algunas ocasiones, hemos pillado una cunas (Gitanos) bellísimas que hablan 5 idiomas y hasta bailan Flamenco 8-O .
Una buena amiga de infancia, a la que llamamos "bombón" por cariño, me encargó un pescadito para comer. Ahí comenzó mal la cosa, porque no hay nada más pavoso que salir de pesca con los pescados comprometidos; generalmente no se pesca NADA :| .
Bueno, al final salimos Manuel, Christian y yo y nos dirigimos a la opción 1. Una corriente del carajo no nos permitía pescar con comodidad y nos teníamos que agarrar del cabo del ancla para poder ventilar, turnando las bajadas, porque de los petos, ni el prefume... :cry: Además, el agua estaba de un color verdoso que no prometía mucho... :?
Hago mi primera bajada (que me cuesta SIEMPRE una bola, debido a la falta de costumbre a esas profundidades) y veo con esperanza que después de los primeros 4 metros, el agua tiene una visibilidad de unos 10 metros :roll: . Al llegar al fondo, me rodea una nube de Jureles ojo gordo de un kilito. No les hago caso esperando alguna pieza mejor y veo en el fondo, posada sobre la arena una picuota de unos 15 kilos 8-O . Parecía un tronco! No me queda mucho aire, pero intento una caída (infructosa), ya que las picúas de ese tamaño, en esa zona, las han visto de todos los colores y su captura es MUY difícil. Subo hecho mierda a respirar y llegando arriba se lo comento a Manuel y Christian. Este último (16 años) se caga todo con la picúa y decide no meterse al agua :lol: .
Se hunde Manuel, mientras yo respiro tomado de la cuerda (con una corriente que me mantenía horizontal) y escucho el Booooooommmmm!!! de su 115 Sten. Mientras pienso " el c..ñ.. de su ma...", lo veo subir con una picuíta de unos 2 kilitos...
Vuelvo a bajar y me vuelve a rodear la nube de ojo gordos y decido asegurar el encargo y sacarle aunque sea un pescadito a Bombon...
Total que luego de unas dos bajadas más yo me fundo y decido que no puedo seguir pescando a esa profundidad con esa corriente (y menos si no hay nada interesante...). Christian nos pide que lo dejemos en la orilla (a él le gusta pescar, pero cuando se ven los petos desde el bote y la visibilidad es de 25 metros. A quién no...
).
Nos vamos al malecón, pero el agua está muy sucia y después de dos bajadas cada uno, decidimos cambiar de zona para ir a la gabarra (el pecio menos profundo).
Hay un corrientón, pero me conozco las marcas de memoria y anclo el bote para poder ventilar agarrados de la cuerda y caer exactamente sobre el barco hundido. Mi "amigo" me dice en el bote: "tu das el primer tiro. Eres el invitado." Total que me preparo con la calma del mundo y cuando estoy por bajar, escucho el conocido Booooommmmm de su Supersten. Se imaginan cómo me acuerdo de su madre
: . Total que bajo igual y veo en su varilla otra picuíta parecida a la primera que sacó. Al posarme en el fondo me llegan unas 20 picúas de ese tamaño, pero veo que atrás hay unas más grandecitas. Les hago una buena espera y me entra una de unos 5 kilitos, que tiro un poco lejos y le doy bajo. Llamo a Manuel para que me la remate y la embarcamos luego de nadar unos buenos 15 minutos remontando la corriente que nos había separado del sitio.
Hago una bajada más y logro fulminar otra picúa un poco más pequeña, pero decente. Veo el reloj y me doy cuenta que me pasé del tiempo por 15 minutos... A CORRER!!!
Aquí las fotos:
Coño, me están creciendo la frente y la barriga... :?
Atrás se vé el torso de Chritian. Se está poniendo papeado el chamo...
Aquí con mi compañero Manuel y mi hermana Mónica, que está de visita en mi casa de Puerto Rico y me acompañó a la playa ese día.
Aquí sacándole los filetes a Bombón y a Paco:
Mi "peinado" se está pareciendo demasiado al de mi amigo Roberto... :lol:
Bueno, como ven, para un par de horas en el agua, no estuvo nada mal, no?
Espero que les haya gustado el cuento.
Nota a los "Censurators"
: . Favor bajar la resolución a las fotos para hacerlas más "amigables".
