Yo lo fileteo, lo corto a trocitos y lo empano. Harina, huevo y pan rallado. Los dejo con un doradito suave y jugosos por dentro.
Lo que viene a ser unos fish fingers de toda la vida. El mayor los suele acompañar con ketchup:
Esta receta va muy bien para pescado congelado porque mantiene bastante la jugosidad del pescado.
Importantísimo: no dejar ni una sola espina en el pescado. Si un niño tiene una mala experiencia con una espina no querrá volver a probar el pescado en años.
A mí mis hijos me han dado mucho cuartelillo con la pesca porque antes a especies como sargos o corbas, las pescaba relativamente poco. Ahora como a mis hijos les encanta, pues puedo pescar estas dos especies tranquilamente e ir llenando el congelador. Así mato dos pájaros de un tiro, les doy buen alimento a mis hijos y yo pego unos cuantos tiros más.
En general, a los niños: siempre el pescado limpio, sin escamas y sin piel.
A los mios también les encantan los boquerones, pero esa es otra historia.