Pues eso, llego al lugar de pesca al amanecer y compruebo que el pronóstico de mar bueno y poca visibilidad no es erróneo, nada más entrar la visibilidad es horrible, pero afortundamente pillando un poco de profundidad se soluciona el tema y pasa a una agradable visibilidad de pesca-sorpresa con claroscuros de hasta casi cuatro metros. Tras dos largas horas de esperas avistando la pieza más grande de unos 100 gramos, hago una bajada y al final de la espera avisto tres o cuatro sombras a lo lejos, me retiro con cuidado y subo alejado, una vez arriba me preparo mientras pienso "llevas dos horas largas y es lo primero que has visto, sin prisas...tranquilo...respira....ale! vamos allá!! empiezo a bajar, llego al fondo, sigo avanzando hasta la zona "avistamiento", paso por debajo de una piedra lo más sigilosamente posible, llego al fondo y cuando apoyo la mano en el fondo veo aparecer por la derecha todo tranquilote a unos 3 metros a la pieza esperada, apunto con calma y zas! queda recuperar la pieza y a la boya. El resto se traduce en casi dos horas más de esperas sin ninguna visita más.
Un saludo y buenas pescas.