Me apetecía ir a mundaka, porque es zona de más sargo, o al menos, mejor zona para poder pescarlos por como es el fondo con grandes rocas desde las que se puede hacer buenos acechos o esperas sin que los bichos te vean llegar... Pero como he oído que podía entrar galerna he preferido ir a Elantxobe, que tiene entrada por puerto por si se ponía mal la mar... salir de mundaka con mala mar... el susto puede ser importante...
Bueno, desde arriba ya se veía que la mar estaba muy tranquila y así ha sido, me he metido y el agua estaba transparente como el cristal, me he ido hacia la zona de la derecha, kilometros de fondo rocoso, pero bastante "plano" todo, no hay grandes piedras o caídas que usar para que no te vean llegar...
En un acecho en el que he alargado más de lo debido la apnea, he llegado a ver 3 sargos bastante majos, pero estaban como a unos 10m. de mi y ya se habían percatado de mi presencia, al primer movimiento para acercarme se han largado pitando...
Al menos, se veía mucho pescado, sargos medianos y pequeños, mucha boga, salpas... no son peces que vaya a pescar, pero al menos se disfruta del acompañamiento en las esperas...
A lo que oteaba el fondo desde arriba, he visto un pulpo que se posaba, he bajado y al verme ha empezado a meterse por un agujero, disparo desde más o menos 0.5m de distancia (viajazo que se ha comido la cressi templa, ni se ha inmutado, estoy flipando con la varilla...), obviamente le pego, pero no hay hueco y la varilla sale. Monto el fusil de nuevo a toda prisa y vuelvo a bajar, el pulpo se ha metido en un agujero... Normalmente, una vez se ha metido en un agujero, no suelo seguir buscando a los pulpos, me suele dar miedo eso de andar así... pero hoy me he animado, me he agarrado al fondo y he mirado a ver por donde podría haber ido, viendo en qué dirección iba el agujero, me arrastro agarrandome al fondo en esa dirección, espero un poco y voilá! veo salir al pulpo. Esta vez me coloco para pegarle a placer, me tumbo a su lado y disparo casi de abajo arriba, la varilla le atraviesa y vuelve al agujero, meto el brazo antes de que se vaya más adentro y lo saco, pulpo para la boya!
Se pone a llover y temiendo la posible galerna, me dispongo a buscar puerto y a lo que voy de camino, una escena de lo más graciosa, una caña posada en el fondo, pero no tumbada, había quedado encajada en una roca y estaba en diagonal, como si alguien la hubiese echado... me acerco a ella y está en bastante buen estado, imagino que se caería de alguna embarcación, imagino que el carrete no podrá salvarse pero lo he desmontado y metido el mecanismo en aceite, a ver si se obra milagro... La caña es de fibra de carbono, un buen palo. Se la he regalado a mi padre, que sigue pescando desde la orilla :p.
Y esa ha sido la jornada de hoy, mañana no podré salir... A ver que tal está la mar el jueves!