Bueno, pues va ser cierto eso de que "como seas malo Dios te va a castigar..."
Con el cachondeo que nos traemos los amigos con la apuesta, con eso de buscar la aleta más cara, y con eso de hacerle gasto porque sí pues....
En la jornada de pesca de ayer, fuimos lejísimos a un sucio de piedras bajas que suele estar turbio siempre, y que por algún bendito chivatazo nos puso en marcha. Tras calentar en un fondo de 23-25 nos vamos al tema y reconozco, que mereció la pena. Hondo, pero cada bajada se dio un pescado hasta hacer 12 piezas.
Vuelta al anterior fondo para buscar dentones en el fango, y es ahí cuando subiendo de una apnea larga (al menos para mi), a la cuarta o quinta palada empiezo a notar que la aleta izquierda no empuja, como si el calzante estuviera descolgado. La sensación aumenta hasta no sentir resistencia alguna. Los últimos 12-13 mts los hice con la pierna derecha, mucha hidrodinámica y la mano en el cinturón, por si las moscas. NO era una espera preparada para hacer 2,22 minutos, pero llegué bien.
Cuando observo la aleta, está partida. Si, no suelta, partida bien partida. No se rompió en un apoyo o golpe, sino aleteando y de forma progresiva hasta quedar sujeta por los cuernos del calzante. Es una CKV 28 Pro Advance que compre nueva en octubre del 2014, y ha sido utilizada no más de 30 salidas.
Por supuesto ya le he escrito a Carlos Fajardo y espero una explicación. Ya discutí por correo (guardado por cierto) que eran demasiado duras para como las había pedido, y se notaba mucha rigidez.
En fin, el día perfecto pudo torcerse muchísimo, pero aquí estamos, que al final, necesitaré las aletas nuevas