Bueno, pues la una de la tarde y ya estoy en el agua, he aparcado de milagro... ahora a centrarse en hacer esperas por la línea de las boyas amarillas, los motores de barcas y el ruido de las motos de agua amenizan la tarde. El verano llegó en Alicante con todo su circo, y su calor.
Las esperas se suceden, las salemas aparecen... más salemas... más esperas... más salemas... más esperas, NOVEDAD!! tres lisas! la ultima que pasa es gorda pero yo no disparo por que seeeeeguro que detrás viene una lubina, un minuto y medio más tarde pienso -tenía que haberme cepillado a la gorda... Cuántos, y cuántas veces se habrá dicho ésto en un contexto distinto un domingo a las 6 de la mañana, borracho, al llegar sólo a casa?
A las cinco de la tarde asomo por un bancal de arena lleno de herreras llavero, muy tranquilas ellas me comentan que allí no han visto nada parecido a un depredador en dias, bueno, de todas formas yo haré unas esperas por si aparece alguna dorada. Pues después de horas "esperando" estando yo flotando en la superficie, miro pa bajo y veo una dorada, me digo- le hago una caída! pero aquí no hay ni agua para hacer una caída! se va! a la mierda! Intento hacer un golpe de riñón suave como el papel del culo de scotex y con la aletas fuera del agua hago un disparo, preciso por no decir afortunado y dejo clavada la dorada en la arena. Salvada lo que iba a ser la cuarta porra seguida pongo mi aletas rumbo al coche "de camino" se me acerca la barca de la policía municipal, me saluda y me recuerda que es una zona con mucho transito de barcas y motos de agua, se lo agradezco y les comento que uso la linea de las boyas amarillas para "cubrirme". Sin ningún problema ya voy saliendo del mar, pensando -seis horas haciendo esperas y la pesco a la caída, creo que aquí no vengo más...
ya sé que no es una gran pesca pero le prometí a Predator una cronica, cuando llegue el otoño, otra.