Me echo al agua con un claro objetivo, ir a una zona a buscar patrulladores, una zona de difícil acceso por la distancia que hay que hacer de infantería y por las corrientes que suelen haber, pero ya se sabe que el que algo quiere algo le cuesta así que esa es mi idea.
Voy haciendo bajadas para ir tanteando la corriente y la termoclina, algún encuentro con algún vampiro a media agua que no da ninguna opción ya que debido a que la termoclina está muy alta y la zona es de pared muy vertical muchas de las bajadas son de acecho para acabar a lo spiderman pegado a la pared intentando taparme con alguna sombra o pequeño relieve.
Llego a una punta donde en esta época se suele proteger de la corriente un banco de espetones y ahí está, tranquilo, con ejemplares bien gordos que se ponen a tiro, pero hoy no les toca a ellos sufrir, van a seguir ahí haciendo de reclamo para lo que pueda llegar, tengo la suerte de verlos en varias ocasiones, os dejo un fotograma desde la misma superficie (foto en el foro, hay que identificarse para verla).
Llego a uno de los puntos buenos y me posiciono en uno de los escalones, al momento la castañuela está nerviosa y da algún bandazo aquí y allá, cuando en uno de los giros de cabeza miro a la izquierda y veo como se va la cola de un dentón enorme que me deja
una pena no haber estado mirando hacia ese lado porque igual había llegado a estar a tiro, otro día será.
Un poco más adelante en otro escalón la castañuela también está nerviosa y de frente me entra un par de anjovas, pejerreyes, chovas, golfases, dorados y uno de ellos claramente más gordo, apunto y disparo, el tiro me sale un poco alto y toca recuperar con calma a una especie tan combativa, pero al final me hago con ella sin problemas y ya tiene un buen tamaño, la cuelgo en la boya y voy volviendo.
Paso otra vez por delante de la bola de espetones sin hacerles caso, hoy no he encontrado lo que buscaba, otro día será aunque me voy muy contento con la captura y cansado