Eso es señores, como cada año en vísperas de mi cumpleaños, la Mar me regala alguna captura anecdótica.
El año pasado una serviaca de 40 kg, otros años un tacherno de 12 kg, mero blanco de 18 kg...
Este año en el que empecé hace pocas semanas a pescar de nuevo, no ha sido diferente.
Llevo unos días encontrándome muy fuerte a Pesar del parón del invierno..así q decidí inspeccionar un precioso bujero como una plaza de toros q conozco este escalon baja hasta 60 m.
Es una zona conocida , ya q es grande y muy castigada por palangreros y cañeros de calamar Vivo.
Pero mi intención era más q nada bajar a admirar lo impresionante del sitio e inspeccionar un podrido de piedra en lo más hondo q ya me ha regalado algún cabezon.
Digo una de mis últimas capturas pq en vísperas de mis 44 años, ya noto q el cansancio post jornada. me deja tremendamente agotado.
(Con 25 años ni llegaba y me cansaba igual
) pero me estoy mentalizando a ir embragando y echando el freno .
Voy a empezar a pescar a menos fondo o menos días, no quiero que me llegue ninguna factura por cruzar la línea..
Y entro en la edad en q esto puede pasar.
creo que es inteligente y conciente que ya no somos niños.
Así q pocas veces volveré a estos profundos ecosistemas q tantas alegrías y espectáculos me han recompensado. Comienza el receso.
Bueno sigo con el lance...
Cai exactamente en el pequeño podrido de roca , y ahí encuentro a un enorme mero de espaldas. Por supuesto y con un 6 en el ordenador NO disparo..
Con un 3 o un 4 en las decenas, si hubiese disparado y casi seguro q queda fulminado.
Pero a esos fondos extremos solo procedemos a garantía 110%
Pues al Verlo de espaldas en un túnel en el q ya he entrado anteriormente a sacar algún marrón. Esta vez NO quise entrar, di la vuelta al túnel para detectar su cabeza pero el miura perro viejo, sabía la jugada y cambiaba de posición dentro del prodrido.
3 bajadas al infielno buscando ángulo a la cabeza , hasta q me da tiro a cerebro y suelto gatillo...
Peeero por algunos milímetros , no lo fulmino, llevaba buena racha tiempo de kaos y justo toca justamente ahora perderla. puuutadooon pero bueno, a cabezon y constante no me gana nadie..
3 bajadas más, meditadas y comedidas para extraerlo sin realizar demasiado esfuerzo abajo y por fin me hago merecedor de semejante y exquisito mero, de los más profundos que he sacado.
Al emergerlo del largo camino, se desata mucha alegría a bordo y más aún pq se estaba levantando un buen viento y ola, Pero el tiempo entre bajadas por seguridad y cansancio es inquebrantable ..Volvemos a puerto y me paso una tarde, agotado, zombi
.
Pero feliz , muy feliz, satisfecho de esta despedida de mis abismos.