Uno de albacete (en realidad de Orihuela, Alicante) que conoce a uno de Logroño (en realidad de Albacete) y que coinciden en Pamplona para ir a pescar a Hondarribia con uno de Irun.
Que pequeño es el mundo...
El caso es que el de Albacete, en realidad Alicantino (usease yo) aprovecha un viaje laboral a Pamplona para quedar con el de Logroño, en realidad Manchego (usease Ramón, Nep) y organizar una pesquita en Hondarribia con un Irunés (usease Joseba).
Quedamos para vernos a eso de las 12 de la mañana (Ramón tenía que desplazarse en autobús a pamplona para irnos desde allí con el coche) y comer pronto y luego pescar a la tarde.
La zona que nos propuso Joseba es esta:
Para un mediterraneo como yo, existía cierta intranquilidad por el estado del mar ya que según comentan es muy variable y aunque a priori parecía muy calmado, había unas nubes sospechosas que amenazaban con meter un buen temporal. No nos separamos mucho de la zona de partida para poder salir rapidamente si la cosa se ponía fea. Al final no llegó la temida tormenta (aunque incluso llovió) por lo que la salida fue de lo más tranquila.
Cabe destacar los formidables accesos, por caminos idílicos de suaves pendientes rodeados de aromáticas florecillas campestres y acompañados en todo momento de alegres mariposillas de colores (por el forro de los cojones!!! y perdón por la expresión... JOSEBA ESTAIS UN POCO LOCOS!!!!) Aquella cabra montesa en lo alto del peñasco que se tapaba los ojos para no vernos bajar no presagiaba nada bueno...
Con las piernas aún temblorosas y el corazón a mil llegamos finalmente a una gran losa inclinada que "daba acceso" al agua. La visibilidad era buena, de unos 8m según las zonas y para un mediterraneo como yo, eso estaba lleno de pescao!!... sargos por todas partes, pintos, durdos, maragotas... CORVAS!!! (vi dos), salmonetes, cabrachos, MUJOLES GIGANTES por todos lados... salpas... Me lo pasé genial, el paisaje submarino era espectacular, grandes losas se adentraban mar adentro, bloques enormes subían desde 10-15m hasta la superficie cruzandose con otros bloques oblicuos... todo cubierto de una manta de alga rojiza y muchas anemonas.
Al final los pasadores no eran muy abundantes. Yo conseguí hacerme con un buen pinto y unos sargos, Ramón un cabracho y Joseba una sepia.
Sólo tengo esta foto del pinto.
La novia de Joseba hizo algunas fotos antes de entrar al agua, a ver si las sube.
