El martes 31 de octubre quedé con dos colegas pa echar un rato en el agua.
Una vez en el sitio, nos asomamos por las rocas y esto es lo que se ve
Tiene buena pinta, no hay apenas mar de fondo, aunque hay viento que levanta olillas. La visibilidad parece buena, asi que sin perder más tiempo nos tiramos al agua.
Yo había decidido llevar por primera vez la cámara de fotos con su carcasa. Hasta ahora sólo la había usado de botellero, siempre encontraba excusas para no llevarla a pescar, que si hay poca visibilidad, que si entrando o saliendo le puedo dar un golpe, que me voy a encontrar con la lubina de 3 kilos cuando lleve la cámara y el fusil esté en la boya, que si lapuedo perder de la boya... Pero bueno, era el día, ya valía de excusas y me decidí a ir con la cámara.
Aquí una foto de Iñigo e Iñaki antes de entrar:
Nada más entrar al agua les voy a decir que les hago alguna foto de estas simulando que haces una espera, pero han entrado un minuto antes que yo y ya van directos a la rompiente, asi que dejo la cámara colgando de la boya y me hago algunas bajadas. Al de un cuarto de hora vuelvo a la boya y descubro que la cámara ya no cuelga del mosquetón. No puede ser! era un mosquetón grande y nuevo que funciona perfecto, y además del mismo mosquetón colgué la linterna, y ésta seguía colgada. "será que me la han cogido estos" pienso yo. "habrán visto un congrio o algo a lo que hacer un video o unas fotos" Pero no puede ser... si están unos a unos 100 metros, además yo he estado cerca de la boya todo el tiempo! Joder, joder, me pongo como loco a buscar la boya.
La carcasa flota con la cámara dentro, y me pongo a buscar en las grietas de las paredes en donde la ha podido meter el viento. Me tiro una hora, y nada, no la encuentro. Voy a llamarles a decir que ayuden a buscarla. Mientras voy a donde ellos un pulpo de dos kilos se me cruza y se viene conmigo. Por cierto, a los pulpos les meto el cuchillo entre los ojos para rematarlos, y que curioso, éste quedó medio cuerpo blanco y medio oscuro, con una raya perfecta que dividía en dos al pulpo.
Vengo con ellos a la boya, salimos por diferentes rocas, buscando la camara por todos los sitios y nada
En esto que iñaki me dice: "fijate en el rebeco ese que han encontrado tan lejos de la costa, puede ser que la cámara se esté alejando en vez de pegarse a la pared" joder, tiene razón. En fin voy a ver si pesco algo, y en veinte minutos cae un salmonete bastante grande.
Salgo del agua pensando en la mala suerte que tengo, o en lo bobo que soy. Quién me mandaría a mi llevar la cámara de fotos a pescar. Nunca he perdido nada de la boya, pero justo el primer día que llevo la camara...
Llego a casa. íƒÆ’í¢â‚¬Å¡íƒâ€š¿qué has pescado? he perdido la cámara. íƒÆ’í¢â‚¬Å¡íƒâ€š¿cómo??? Le cuento a la jefa lo que ha pasado y me empieza a insultar, tu eres tonto... (ella usa la cámara más que yo) si la cámara no flota!! íƒÆ’í¢â‚¬Å¡íƒâ€š¿no? íƒÆ’í¢â‚¬Å¡íƒâ€š¿seguro? Claro que no! es que eres tonto! Yo hace un par de años que no usaba la cámara con la carcasa (desde el verano del 2004) y ella lo ha usado más. La verdad que yo juraría que tiene una flotabilidad casi neutra, pero tendiendo a flotar. Me asegura que no, que es casi neutra pero despacito despacito va hacia el fondo.
Vale, mañana a primera hora voy para alli.
Hoy miercoles a las 7:45 alli estaba yo, sólo, lloviendo, pegaba viento del norte y estaba la mar más revuelta, pero bueno, había que intentarlo.
Entro al agua, y en la segunda bajada veo un pez que se aleja, es una lubina pequeña. Me quedo quieto en la piedra a la que he bajado y se para. me escondo un poco y viene disparada hacia mi, que nervios! nunca he pillado una lubina, sólo una vez he tenido una a tiro, y la fallé no se cómo. Se acerca mucho, y zas! en toda la jeta. Vuelvo a bajar y veo un par de sargos gordos en el limite de visibilidad, pero no tienen ninguna intención de venir a saludarme. Cuando me despego del fondo veo que un breado majo estaba muy cerca de mi a mi derecha, y unas cuatro o cinco lubinillas por detrás. Como lo mas gordo eran los sargos vuelvo a bajar mirando hacia ellos, pero nada, ya ni les veo. Antes de subir miro para atrás y alli estan las lubinetas, bastante cerca. Bajo dos, tres, cinco veces pero no las vuelvo a ver. Bueno, vamos a buscar la cámara, que es a lo que he venido. Me tiro una hora entera venga a bajar y subir, mirando en todas las grietas y agujeros veinte metros a la redonda de donde dejé la boya ayer... y nada!
Ha pasado toda la noche, hay mar de fondo, puede estar muy lejos... Desesperado lo dejo. Me dedico a pescar un poco, pero el viento sigue subiendo y esto se empieza a poner feo, teniendo en cuenta que hay que salir casi escalando por las rocas. Así que me voy a ir, he cogido mi primera lubina y no estoy ni contento. Me acerco a las rocas de salida haciendo acechos, y en la última bajada tachaaan!!! la cámara encima de unos guijarros .Si he pasado por aquí veinte veces!!! de dónde ha salido!!! Qué alegría!!!!
Me salgo por fin con la cámara y aprovecho para hacer alguna foto
Y aquí mi primera lubinilla, es pequeña, ya lo sé, pero hace ilusión. A ver si las empiezo a ver más a menudo y se me acercan las grandecitas
