Disculpad que me entrometa, amigos.
Como la pesca submarina es un deporte, creo que va a ser muy dificil desligarla de las competiciones y aunque no lo queramos siempre va llevar implícita en sí misma la competitividad: competir con otros (algo que para muchos tiene sentido pero para otros no) o tal vez competir con uno mismo, con lo que uno era antes como pescador para mejorar constantemente (esto tal vez sí sea loable). Realmente a la final, lo que pesa son las rezones prácticas y comerciales. Las competencias, especialmente las vuestras donde se reunen pescadores de mucha calidad que son admirados y seguidos, son en realidad una vitrina para las grandes marcas íƒÆ’í‚¢íƒÂ¢í¢â‚¬Å¡í‚¬íƒâ€¦í¢â‚¬Å“lucirseíƒÆ’í‚¢íƒÂ¢í¢â‚¬Å¡í‚¬íƒâ€ší‚ y convencer a gran parte del mercado a comprar sus productos. Si le quitan esa vitrina a las marcas tal vez se desanimen un poco a innovar (una excusa de los empresarios muy de moda en estos días). además están los clubes, federaciones y asociaciones que de vez en cuando necesitan un trofeo para sus estantes...
Lo utópico, si se van a hacer competencias, es que éstas tengan unas reglas que no atenten contra el ambiente donde se realizan ni contra la ética ni salud de los deportistas que participan. Tallas mínimas sensatas para cada especie, limitar el número de capturas, puntuar más las que más trabajo y experiencia requieren, ser sobrios durante el pesaje, tener igualdad de condiciones (una verdadera utopía porque los locales siempre llevan ventajaíƒÆ’í‚¢íƒÂ¢í¢â‚¬Å¡í‚¬íƒâ€ší‚¦), en fin, todo lo que han dicho UdsíƒÆ’í‚¢íƒÂ¢í¢â‚¬Å¡í‚¬íƒâ€ší‚¦ Como las reglas de muchas de las competencias de Blue Water Hunting, donde sólo vale el mayor ejemplar de cada una de las especies válidas por cabeza, y cada pescador tiene un tope de tres a cinco peces por día (como para pensaríƒÆ’í‚¢íƒÂ¢í¢â‚¬Å¡í‚¬íƒâ€ší‚¦ íƒÆ’í¢â‚¬Å¡íƒâ€š¿disparo o no disparo?). Pero pienso que el problema que sucede con ustedes en España, donde cada vez es más difícil conseguir suficiente pescado y de buen tamaño (así pasará con nosotros en un futuro también, es cuestión de darle tiempo al urbanismo, a la pesca comercial, etc) es: íƒÆ’í¢â‚¬Å¡íƒâ€š¿dónde conseguir un lugar en el que se planifique una competencia y, que si se establecen unas reglas muy restrictivas, se capture algo de pescado? Si se ponen muy restrictivas las reglas se le daría mucha más relevancia de la que ya tiene a la suerte, y en algunas regiones sólo ganarían quienes bajan 40 metros, supongo, algo muy peligroso (y que a la final se impone en la práctica).
En finíƒÆ’í‚¢íƒÂ¢í¢â‚¬Å¡í‚¬íƒâ€ší‚¦ para qué competir? Yo no lo hago. PeroíƒÆ’í‚¢íƒÂ¢í¢â‚¬Å¡í‚¬íƒâ€ší‚¦ íƒÆ’í¢â‚¬Å¡íƒâ€š¿sin las competencias se habría conocido a Amengual fuera de España o de las Baleares? Tanta gente ha mejorado al imitar o aprender de un maestro que no tiene cerca...
Cada época y lugar tiene su íƒÆ’í‚¢íƒÂ¢í¢â‚¬Å¡í‚¬íƒâ€¦í¢â‚¬Å“mentalidadíƒÆ’í‚¢íƒÂ¢í¢â‚¬Å¡í‚¬íƒâ€ší‚Â. Supongo que en la época de Amengual sus fotos con aquellas matanzas de grandes meros no eran algo chocante. Ahora le toca a los pescadores de la actualidad algo más difícilíƒÆ’í‚¢íƒÂ¢í¢â‚¬Å¡í‚¬íƒâ€ší‚¦ menos pescado y mayor conciencia ecológicaíƒÆ’í‚¢íƒÂ¢í¢â‚¬Å¡í‚¬íƒâ€ší‚¦ Todo cambia, y para mal pareciera!
Saludos
Alexis