Pues eso una buena pepona cogida hace horas en aguas zahareñas, después de un ponientazo de coj.. damos con unas zonas que pintaban bien, tras la primera bajada veo un abadejo gordo, que se mete en su boquete, cuando me asomo, eso no era una cueva era una catedral, con escalinatas hacia abajo.. alumbro con la linterna y se perdía la luz en el fondo.. que mieo, no estuve dispuesto a comprobar lo que había dentro...del abadejo ni sombra y yo no quería complicaciones... a lo que vamos, subo para arriba, tomo aire y justo caigo en el boquete de al lado, miro para arriba y me están desfilando 2 peponas de campeonato, se me acercan, si miedo y mirándome. y no sé si fué instinto o miedo a que se fueran que le pegué un tiro lejano que le partio la espina, tiró un poco pero hay estaba el tío para darle su abracito...
Cuánto pensáis que pesó?? me he llevado una sorpresa..
la vuelta a puerto con poniento un coñazo...