Recojida libre de erizos por parte de los vecinos de Ortegal y de la Mariña luguesa. Como tiene que ser la cosa .....(y eso que en mi vida he cogido un erizo por falta de costumbre, porque dicen que estan buenos, pero no los he probado demasiado, quizás el próximo día)
Crónica | Una singular campaña de promoción
El erizo, manjar del puebloUnos 300 vecinos de A Mariña y Ortegal, de los 1.500 inscritos, se lanzaron ayer a las playas para recolectar este equinodermo
Autor de la imagen: PEPA LOSADA Publicidad
(Lugar: m. g. b. | viveiro)
íƒÆ’í¢â‚¬Å¡íƒâ€ší‚«íƒÆ’í¢â‚¬Å¡íƒâ€š¿Sabes ti cantas unidades caben nun kilo?íƒÆ’í¢â‚¬Å¡íƒâ€ší‚» La pregunta la realiza Jesús, de Cangas, armado con un arcaico ferro de cocina y un cubo, en mangas de camisa y atareado en recolectar los erizos que se ocultan entre las piedras de O Cantiño, en Burela. A las diez de la mañana -coincidiendo justo con el horario de apertura de la
primera jornada de extracción libre de erizo autorizada por Pesca en la costa de Lugo y el Ortegal coruñés- se plantó en la playa, y como él, otra docena de vecinos de la zona. Si se busca definir la actitud con la que mariñanos de a pie se echaron a las playas en busca de los erizos que la marea dejó en las pozas, la expresión más justa sería decir que parecían niños estrenando zapatos nuevos.
íƒÆ’í¢â‚¬Å¡íƒâ€ší‚«Ah, ourizos, manxar de diosesíƒÆ’í¢â‚¬Å¡íƒâ€ší‚», apuntaba. Y Pepita, sentencia sin dejar de rebuscar entre las algas: íƒÆ’í¢â‚¬Å¡íƒâ€ší‚«Mira, gústannos os ourizos. Dende hai dez anos non nos deixan collelos e non ten gracia comelos mercadosíƒÆ’í¢â‚¬Å¡íƒâ€ší‚». Mientras, Mari Toñi abre un ejemplar recién cogido e invita a los redactores de La Voz a probarlos crudos. La cata in situ, con el agua cubriendo los pies, es un éxito. Es como comerse un trocito de mar, un manjar directamente servido por Neptuno. íƒÆ’í¢â‚¬Å¡íƒâ€ší‚«Esto con albariño...íƒÆ’í¢â‚¬Å¡íƒâ€ší‚»
Seguimos la ruta que nos lleva por la costa hasta Cangas, en Foz. Estamos en zona con tradición de recolección de erizos. Unas 38 personas se distribuyen por la arisca Louxeira, apunta Pepe Villar,
que recuerda los enfrentamientos que se registraron hace diez años. íƒÆ’í¢â‚¬Å¡íƒâ€ší‚«Moita xente tivo que pagar 25.000 pesetas de multa por facer algo que era tradición: ir á ribeiraíƒÆ’í¢â‚¬Å¡íƒâ€ší‚».
En los vados de piedra de A Raxoa, José Antonio y José aprovechan la mañana. Hay poco erizo de buen tamaño, pero las pozas están plagaditas de pequeños ejemplares. íƒÆ’í¢â‚¬Å¡íƒâ€ší‚«íƒÆ’í†â€™íƒÂ¢í¢â€šÂ¬í…“ mellor na próxima marea xa se poden colleríƒÆ’í¢â‚¬Å¡íƒâ€ší‚», señalan. Llevan, sin embargo, un buen cubo lleno de erizos. Francisco, antiguo cartero de Nois, jubilado, lía un cigarro con calma. Un único ejemplar flota en su caldero, pero no tiene prisa. íƒÆ’í¢â‚¬Å¡íƒâ€ší‚«
Eu viña sempre, colliamolos para consumo, pero tamén para as galiñas e os campos, servían de abonoíƒÆ’í¢â‚¬Å¡íƒâ€ší‚».
En As Polas, dos asturianos carretan sus cubos al hombro. íƒÆ’í¢â‚¬Å¡íƒâ€ší‚«Estos que llevo nos los zampamos mi mujer y yo en la meriendaíƒÆ’í¢â‚¬Å¡íƒâ€ší‚», apuntaba uno de ellos. Y es Asturias precisamente el principal mercado del erizo del norte gallego.
Jubilados y mujeres, preferentemente, que la Consellería de Pesca cifró en 300 personas, fueron quienes tomaron las playas en la primera jornada de libre extracción del erizo de mar. No hubo que lamentar ningún incidente, y la media fue de 3,5 kilos recolectados por persona, cuando el límite estaba fijado en cinco. Quedan siete días y las mejores mareas, pero los vecinos ya piden que la campaña se repita cada año.