-Adaptar nuestro cuerpo, progresivamente, a la profundidad cuando empieza la temporada de verano y ser muy precabido en las primeras bajadas profundas. Nuestro cuerpo y nuestra mente necesitan cierto tiempo, las prisas son muy traicioneras.
-No perder de vista nuestra embarcación durante mucho tiempo por si garrea o por si ha roto el cabo del ancla
-Revisar periódicamente el cabo del ancla, grilletes, etc...
-LLevar siempre el móvil con batería cargada
-Hidratarnos continuamente durante toda la joranda
-Otear el horizonte cada cierto tiempo para comprobar el rumbo de las diferentes embarcaciones y tenerlas controladas. Al mínimo ruido de motor que escuchemos en el fondo hay que subir para comprobar el rumbo de dicha embarcación.
-LLevar el cuchillo siempre en el mismo sitio y bien afilado (que sea capaz de cortar el monofilamento). Hacer unas pruebas de vez en cuando no vienen mal.
-Si llevamos pasapeces de cintura, que no impida el zafado cómodo del cinturón. Lo mismo con el cabo de la boya.
Por cierto, la mayoría son recomendaciones. Si quiere, que Denhoun les ponga el No delante.