Hola!
Hoy por fin, después de pasar una otitis muy laaaaaaaarga, me he tirado a pescar.
He salido con un amigo hacia Denia a eso de las 9, pero hasta las 11 no salia el barco de puerto. La demora se ha debido a que primero he intentado instalar mi pisete en el traje. Resultado: fracaso total y pis dentro del traje :x .
El día no pintaba nada mal, sol, nada de viento, buena temperatura,... Pero al llegar a la zona seleccionada me he encontrado con un agua verde y bastante corriente.
Alli he ido siguiendo una buena barra que cae de los 8 metros hasta los 12, pero sólo he disparado una vez. Y ha sido a un sargo breado de un tamaño más que aceptable. Lamentablemente iba con el fusil de pescar al agujero y no he calculado bien la distancia. Resultado: la varilla ni siquiera ha llegado hasta el pez, que se ha ido nadando tranquilamente.
Al final, después de estar unas 2 horas remontando corriente para luego equivocarme a la hora de caer en el sitio, me he hartado y he decidido cambiar de zona. La nueva zona está pegada a la costa y es una zona donde rompe el poco mar que hay. Siempre me había parecido una zona de lubinas, pero nunca había visto ninguna de buena talla.
Así que fondeo el barco y me tiro rápido para la zona de espumilla (nada que ver con la rompiente del Norte :roll: ). Nada más llegar veo que hay mucha llisa de buen porte y nadando entre ellas se puede ver alguna lubina que se acerca un poco a ver quien es el extraño que está invadiendo su territorio. Entonces busco un sitio que pueda posarme bien a la espera (cosa complicada porque la profundidad sería como de 1m y no iba lastrado en consecuencia).
Al final lo consigo de malas maneras y antes de sumergirme pego un buen manotazo contra el agua. Al medio minuto de estar a la espera, veo como por mi izquierda se aproximan poco a poco tres lubinas. Así que bien despacio voy moviendo el fusil para tenerlas a tiro. En cuanto una de ellas me da disparo, no lo dudo y zambombazo en toda la cara. Ahi aparece el momento crítico del día, porque el disparo no ha sido bueno como parecía en un principio, ya que en vez de darle en plena cabeza el tiro ha ido a parar a la boca. Gracias a Dios lo he visto y rápidamente le he dado el abrazo del oso. Resultado: lubina de 1,75 kg que se viene conmigo para Valencia.
Después de este tocho vienen las fotos de rigor:
Un saludo.
Pepe.
P.D.: Por cierto podeis apuntar 1,75 kg más para la zona del mediterraneo en el concurso. Pensaba que nunca llegaría a colaborar con la causa...