Si me permitís mi humilde opinión, hace unos meses estuve pescando durante unos cuantos días con unos fusiles Trygons, en concreto con un DMF-R 120 y un DMF-R 130 (por cierto, DMF viene de Die Mother Fucker), que son justo los dos de los que Pau ha puesto fotos.
El 120 tiene una sección muchísimo más contenida que el 130, es equivalente a un madero de los que hay por ahí, de hecho en la punta es relativamente fino, prácticamente como uno de aluminio. El 130 parece diseñado para cazar elefantes.
El 120 que probé yo llevaba varilla de 140 de 7í‚´2 mm con dos gomas de 16 mm que se estiran muchísimo, casi hasta el apoyo de carga, gracias al mecanismo que monta. Estaba equilibrado de forma que se hundía de punta, quizá un poco más de lo que a mí me hubiese gustado, pero bastante neutro. Se mueve en el agua como lo que es, un fusil de 120 con cierta sección y dispara como lo que es, un 120 con gomas de 16 mm. Para mi gusto poca potencia para semejante cacharro, aún cuando la elongación de los elásticos es bastante alta. Por lo visto el poner gomas de 18 mm aumentaba demasiado el retroceso, afectando mucho en la precisión.
El 130 es un trasto en condiciones, con mucha masa gracias a que dispone de una cámara que se llena de agua que funciona como lastre para contener el retroceso. Estaba equipado con cuatro gomas de 16 mm y varilla de 150 mm con 7í‚´2 de sección. No es sólo una versión más larga del 120, es muchísimo más gordo también. Aun siendo bastante difícil de mover debido al volumen que tiene, está muy bien equilibrado, lo que ayuda mucho. Este fusil está diseñado para pescar bichos grandes y aunque apenas hice un par de disparos con él, el pepinazo que pega es de cuidado, con mucho menos retroceso que el 120.
En cuanto al mecanismo, si bien ofrece un gran estiramiento de las gomas, a mí había dos cosas que no me gustaron: la primera que había que poner un trozo de neopreno detrás del gatillo, no recuerdo ahora mismo por qué y que había que insistir bastante para insertar la varilla.
Detalles como lo del carrete integrado en el fuste están bien para contener el tamaño del conjunto, ahora bien, si el carrete no te gusta vas dado.
La conclusión que saqué de usarlos es que en el caso del 120, sinceramente para usar un par de gomas de 16 mm, prefiero usar un fusil de otro material más barato y menos problemático que el carbono. En el caso del 130, el dueño que es un austriaco bastante cachas, lo mueve como si fuera un palillo. A mí encarar a una barracuda me costó horrores, eso sí, el varillazo que se llevó todavía lo recuerdo como el tiro más bestia que he pegado en mi vida. Si tienes la oportunidad de encontrarte con bichos gordos y lo suficientemente estáticos como para atizarles puede ser una solución, eso sí, bien cara.