Bueno, pues antiés por la mañana tras un par de días de frío de los cojones y bastante lluvia, por fin, viento del Sur ¡que alegría!.
Salgo a pescar y una vez que llegué, los primeros 200m desde la orilla se veían de color marrón, detrás verde y un poquito mas a dentro de color azul. Eran las 9h de la mañana y no me lo pensé dos veces. Me cambié la ropa y para dentro.
La primera ola me rompió en la cara y perdí el tubo. No se veía ni 30cm, no pasaba nada, tenía otro de repuesto en el coche, pero estaba a unos 500m de distancia, una putada, pero no tuve mas remedio que ir.
Segunda entrada al mar. Ahora con un poquito menos de prisa, nadé unos 100m para dentro. El agua cambió a color verde intenso, no veía ni la punta del fusil (cressi gerónimo pro 115). Siempre llevo un segundo fusil amarrado en la boya (un spora sub 75) que me salva en ocasiones como estas. Cambié el fusil, nadé unos 50m mas y ya se veía la punta de la flecha.
Mi primera espera en un fondo de 8m, pegado al filo de una roca grande, con 1,5m de visibilidad. Había vida que no era normal. Los Sargos de buen tamaño pasaban por encima de mi fusil. Tras un par de esperas salió mi primer Sargo picudo de buen tamaño. El segundo un Breado. El tercero un Sargo común.
Salí después de 2h mas o menos, poque ya tenía los ojos pegados en el cristal de las gafas, pero con un buen sabor de boca. Me llevé la cena de Navidad. Un saludo a todos.