El sábado fui a pescar a una zona en la que el día antes un amigo había tenido algunos "encuentros".

Mi lumbargia no está para muchas fiestas así que plantee una salida tranquilo y sin forzar la espalda lo más mínimo. Ya en el pesquero me dirijo a la zona "caliente" y empiezo a hacer esperas, una tras otra sólo aparecen lubinas de medio kilo y alguna kilera entre ellas, muchos sargos de menos de medio kilo pero nada de lo que había ido a buscar...
En una de las picadas me paro en una piedra con un canal a mi izquierda y otra piedra a mi derecha que sube levemente del fondo, al minuto de estar abajo veo como por mi izquierda viene lentamente este robalo pegado al fondo, apunto y zas, rolerazo en el medio del cuerpo (estaba como a tres metros de distancia), pega una arrancada brutal y se enroca, salgo detrás de él pero me queda poco aire y subo. Ventilo rápido y vuelvo a bajar con el cuchillo, lo inmovillizo y un nuevo trofeo entre mis manos.

me quedo un rato admirando el porte de este pez y continuo.
Recorro algo más de un kilómetro haciendo bajadas aquí y allí pero mi espalda me dice hasta aquí hemos llegado. Salgo del agua contento pero con muchos dolores.
El domingo salí a dar una vuelta un par de horitas y así probar el chaleco de laste de mi tio, un sporasub, y el cambio fue radical, mi lumbago no sufre, aunque pesqué incómodo porque no es de mi talla. La pesca fue escasa y sólo un par de sargos se vinieron a casa.
Aqui la foto del robalo. 6,6 Kg.
Saludos
