Pues eso. Salimos el sábado con Fafa, que se compró un bote nuevo (Mako 19,2' + Yamaha 150 Hp).
Saldríamos con su papá, el Sr. Athos y con Willy, un amigo de su infancia.
Yo tenía que estar temprano en la casa porque tenía un compromiso con mis niños y el acuerdo era salirnos del agua a las 3 pm a más tardar...
Fuimos a Los Platos, un pesquero "caliente" donde siempre ha caído algo bueno, pero la verdad es que no había mucho movimiento; la luna llena no ayuda...
Cayeron solamente 3 sierras de tamaño bueno, pero no "fotografiables".
Decidimos ir a un sitio dode Fafa tiene una piedra con 20 langostas esperándolo cada vez que va, pero el agua estaba asquerosamente turbia. Total que las langostas siguen ahí...
Luego nos movimos a otro pesquero donde Naranjo tiene 34 pargos amarrados, pero tampoco estaban. Entonces yo me salgo del agua y me pongo a contar chistes con el viejo Athos y con Willy, mientras Fafa pesca cerca del arrecife y Naranjo nada hacia la caída.
Fafa vuelve con un pargo bonito, lo deja en el bote y sigue pescando por un rato más hasta que se sube al bote y comenzamos a buscar a Naranjo....
Ya son las 3:30 pm y el cabrón no aparece!
Decidimos sacar el ancla y buscarlo. 3:45 y nada....
3:50 y NADA!
Son las 4 pm y no lo vemos. Ya me estoy comenzando a preocupar, pero pienso "coño! lo que hay son 6 metros de agua! Ese pendejo no se va a ahogar ahí!"
Cuando ya tenemos todos la mirada preocupada (aunque nadie dice nada) y un nudito en la garganta, Willy lo ve: "Ahí está! Mira como levanta el arpón!" Se nos bajan los bolas, que estaban de corbata y vamos todos decididos a recordarle el día en que nació (él y su mamá!)
Al llegar, lo vemos subido en su boya y me dice: "Pásame otro arpón!" "Pá qué?" le pregunto. "Que me pases otro arpón te dije!" Con las ganas que tenemos todos de matarlo, le paso el C3 (Riffe). Se hunde por unos segundos y nos llama para que jalemos la boya.
El muy cabrón le había tirado a este tiburón justo a las 3:10 pm SOLO y lo había estado remolcando por más de una hora. Obviamente, no había manera de rematarlo...
Luego, con nuestra asistencia, todo fue mucho más fácil y logramos embarcarlo y rematarlo con 48 puñaladas en la cabeza.
Ahí les dejo las fotos.
