Salida cargada de anécdotas con los compañeros Orlando (Cachalote) y Edgar. La pieza va dedicada a ellos, por el buen rato de pesca, al compañero del foro Daniel para que vea que doy buena cuenta
y a Raúl con puro recochineo
, jajaja!
Bajada a un pequeño cantil, me arrastro hasta asomarme al borde sigilosamente, miro a un lado y a otro pero nada se acerca, desilusionado decido esperar un poco a ver si viene algo y vaya si venía, derechito sin titubear y justo delante de mi. Qué momento y qué mirada, encaro el fusil pesando si dispararle tal cual viene pero viendo lo decidido que se acerca espero a que se gire para asegurar el tiro y no fallo. El primer arreón fue descomunal, maldita sea que va a meterse debajo del cantil por lo que tengo que subir separándome para poder sacar el monofilamento de las piedras. Una vez sacado se resiste pero ya va viendo cuál es su destino... Subida apoteósica, ya en superficie recogiendo con cuidado hasta que por fin puedo hacerle el abrazo del oso. ¡¡De aquí no se escapa!!
He de decir que es mi primer dentón, sama guachinanga es otro nombre por el que se le conoce a esta especie en canarias. 6,3kg en la báscula y la sonrisa de oreja a oreja
pues aquí es una especie muy difícil de ver, imagínense coger.
Además del dentón hemos pillado un avión planeador
Moviéndonos de punto en punto miro algo raro flotando en superficie y lo comunico a los compañeros, el primer pensamiento fue que era un palo pero Orlando se fijó bien y adivinó la figura del avión,jajaja! Así que nos acercarmos y flipamos al ver lo que era. Lo mejor de todo es que cuando lo cogemos empezamos a oír los gritos de festejo de unas 15 personas desde lo alto de la montaña/acantilado, pero vamos que estaban a tomar por culo en las alturas. Lo único que veíamos era su silueta. Les hicimos señas como para que fueran al muellete deportivo que íbamos para allá pero por allí no apareció nada.
Buen azul a todos
