en mayo he batido mi récord de roscos, junto con el mal tiempo y mar que han vedado algunos días de más y una otitis que idem, en definitiva he salido menos de lo habitual y como comento los roscos se me han acumulado, aun así algunas satisfacciones mayo me ha dado, siempre oportunidades solitarias en la jornada sin mayores abundancias o alegrías y esperanzas de "al menos verlos y saber que por ahí andan", la bicuda un regalo, ya estaba dando la jornada como rosco y me la encontré inmovil debajo mío, aguantó la picada y en segundos era mía, no me satisface pescarlas así, pero tampoco era cuestión de no intentarlo
los gallos los vi desde arriba, son los primeros que he visto en este año que recuerde, bajé con intención de doblete pero no hubo manera de que se alinearan, así es que para arriba y a volver a intentarlo, se habían movido y en mi recorrido los vi debajo de una cornisa, no los enfilé directamente para que no desconfiasen más y esta vez si se alinearon y conseguí el doblete de este humilde y muy sabroso pez
algunas sierras siguen aproximándose por la orilla y a base de insistir, a veces se cruzan nuestros caminos, la segunda de ellas la vi venir fuera de la trayectoria de mi fusil, no quise reaccionar enseguida moviendo el fusil para no espantarla, y esa fracción de tiempo casi me cuesta su captura, era más rápida que mi brazo y a duras penas pude darle un tiro trasero, que no alcanzaba a apuntarle más adelante tuve suerte y no fallé
el verrugato me lo encontré sin darme tiempo a posicionarme en el fondo, otro regalo inesperado, me falló la puntería y el tiro en vez de dejarlo offf, me salió algo alto y menos mal que lo dejé en el hilo, porque esos tiros se desgarran con facilidad
la bandadita de 5 verrugatos fue otro día y en otro sitio, fue lo único que vi aparte de viejas y como no daban mi talla, me conformé con su presencia y su belleza en el agua, los meritos idem, rondarían los 2kg e idem, me conformo con imaginarmelos creciendo, y finalmente de nuevo otra tortuga me alegró la retina, ya la vi otro día en el mismo lugar y según piqué para filmarla salió escopeteada, esta vez aguantó mejor mi caída y con el truquito de girar la camarita del fusil y utilizar éste cual alargador, me quedó una bonita toma de su elegante natación